EDITORIAL
El exministro no puede dejar de comportarse como lo que es y su breve comparecencia de este lunes ha sido, una vez más, un perfecto ejemplo de la soberbia y el matonismo declarativo a los que el propio Rubalcaba nos tiene acostumbrados:
Amando de Miguel
En el fondo se trata de una extraña vuelta al sistema de los funcionarios cesantes del siglo XIX. Solo que ahora nadie cesa, simplemente cada nuevo Gobierno añade su propia camada de servidores del partido, que pasan a serlo del Estado.
Fray Josepho
Extremista, fanático, arbitrario, / prosoviético, agreste y papanatas, / que sustentas teorías mentecatas