Hay dos Arrimadas: la dignísima jefa de la oposición que canta las cuarenta a los nacionalistas y la portavoz de corte unionista (de Unió, quiero decir).
Poner el foco en los asentamientos es la táctica que se han inventado los palestinos desde los Acuerdos de Oslo para justificar su estrategia de evitar la paz.
Vamos como borreguitos a votar cuando nos citan, perdonamos la corrupción atroz que nos asuela, el nepotismo y las tomaduras de pelo desde los poderes públicos.
El problema no está en la futura independencia 'de iure' de Cataluña, sino en la persistente independencia 'de facto' que desde hace años se le concede.
Si algo deja entrever la idea del Gobierno Cifuentes es un desconocimiento que linda con lo enciclopédico sobre cómo funcionan los asuntos del Dinero (con mayúsculas).
Resulta en extremo delirante que los matones del catalanismo operen con tamaña impunidad y se cisquen en las leyes de todos sin la más mínima consecuencia.