Para los jefes de Google no se trata de meras diferencias de opinión, sino de la lucha entre el Bien y el Mal. Y contra el Mal no puede haber medias tintas.
No es verdad que el modelo de turismo de España sea único, ni que esté enfocado a una oferta masiva y barata, ni que sea el responsable de vaya usted a saber qué dramas.
Por esto creamos medios de comunicación liberales: porque la historia de estos últimos cien años de comunismo demuestra que nadie ha aprendido nunca nada.
No sé si Raúl Castro y sus consejeros han examinado el perfil de las naciones exitosas, pero todas están sujetas al crecimiento mediante el 'orden espontáneo'.