El jueves era el día en que Microsoft presentaba Bing, su nuevo buscador. Estaba previsto que fuera la noticia de la semana: Microsoft anuncia un buscador, este sí, capaz de competir con Google. Teniendo en cuenta que cada dos o tres meses aparece un buscador "que va a terminar con la hegemonía de Google", tampoco es que dejara sin aliento al mundo de la tecnología. ¿Alguien ha usado Cuil, Wolfram Alpha, Wikia o Quaero? Pero era una noticia de Microsoft, que además gastará 100 millones de dólares en promocionar Bing, y tal vez esta vez, después de los fracasos de MSN Search y Live, Microsoft pueda tener una oportunidad.
Pero Google, al menos por una vez, fue malvado. Muy malvado. Robó el protagonismo a Microsoft anunciando un producto tan innovador y tan revolucionario que consiguió que el público que atendía a la conferencia en la que se presentó lo ovacionara puesto en pie. Falta todavía un año, al menos, para que podamos usar Wave, pero ya han conseguido que muchos estemos deseando que llegue el momento en el que lo tendremos en nuestro navegador.
Wave, según Lars Rasmussen, uno de sus creadores, es "lo que sería el correo electrónico si se hubiera inventado hoy". Si Gmail y Facebook tuvieran un hijo, y este hijo fuera al colegio con Twitter y FriendFeed, sería algo muy parecido a Wave. De momento sólo puede verse un vídeo con una demostración del prototipo, pero es realmente espectacular. Por si no fuera suficiente, Google ha decidido que Wave será software libre y tendrá un API abierto. Lo que quiere decir que en torno a Wave surgirán aplicaciones que abrirán aún más posibilidades. Dentro de dos o tres años, Wave habrá cambiado la forma en que nos comunicamos a través del ordenador.
De modo que Google ha pillado otra vez a Ballmer y compañía con el pie cambiado, como sucedió con Google Maps y Google Docs. Microsoft puede ser el rey en el mundo del ordenador, pero en internet no consigue hacer otra cosa que intentar perseguir al líder, con la lengua fuera y cada vez a más distancia.
Borja Prieto
La ola de Google arrasa a Microsoft
Microsoft puede ser el rey en el mundo del ordenador, pero en internet no consigue hacer otra cosa que intentar perseguir al líder, con la lengua fuera y cada vez a más distancia.
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