Dicen que la lealtad, el honor, la valentía y el sentido de servicio son las características que definen a los perros de trabajo. Estos rasgos hacen de estos animales los compañeros perfectos de los agentes de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Juntos velan por nuestra seguridad y bienestar. Para ellos el trabajo es un juego, pero un juego que salva vidas y contribuye a que se cumpla la ley.
Pero la vida laboral de los perros, como la de los humanos, tiene un límite. En su caso, la jubilación les llega alrededor de los 8 años. Y, como las personas, merecen un retiro apacible, dorado, feliz; merecen una familia y un hogar.
La primera opción de acogida la tiene el que ha sido su compañero durante los años de trabajo, pero no siempre es posible, es entonces cuando se les busca una segunda familia. Asociaciones como Retired Dogs 112 y sus fundadores Noemí Gonzalez y Rafael Domínguez, que nos han visitado en Es la mañana de Federico, ayudan no solo a encontrar la familia perfecta para estos perros -en muchas ocasiones héroes- sino que también velan por el bienestar del can, antes, durante y después de la adopción. Lo hacen de forma totalmente desinteresada porque saben que estos perros merecen ser felices tras años de servicio. En su página tienen toda la información para adoptar y también para ayudarles en esta importante labor. Porque estos perros no deben caer en el olvido.
Ajax evitó una masacre
Para que no sean olvidados y para dignificar la importante labor de los perros de trabajo, estas asociaciones llevan a cabo homenajes a canes como Ajax, el perro de la Guardia Civil condecorado por su valentía con la medalla de oro.
Este precioso pastor alemán marcó el 30 de julio de 2009 una bomba lista para explotar adosada a un coche en Palmanova (Mallorca), después de que ETA asesinara a dos guardias civiles, lo que permitió detonarla bajo control y evitar una masacre.
Pretto murió como un héroe
O como Pretto, el labrador que murió en una explosión en el Instituto Italiano de Cultura de Barcelona cuando inspeccionaba junto a su compañero -que resultó herido- una cafetera con un explosivo en el interior.
Perros jubilados, perfectos para adoptar
Los perros de trabajo, aunque estén jubilados siempre serán "viejos sabuesos". Son perros muy bien adiestrados, de un carácter equilibrado, fiel y perfectos para una familia. Por su edad y entrenamiento, son unos animales tranquilos, cariñosos, con una gran capacidad de adaptación a su nuevo hogar, llegando a querer tanto a su nueva familia como a la primera.
Hay que tener en cuenta que necesitarán un periodo de adaptación a su nuevo entorno, que son un ser vivo al que nos comprometemos a querer y cuidar, y tener presente que son perros que han entrado ya en su tercera edad. Adoptar a estos perros, convertirlos en un miembro de nuestra familia, es un acto de bondad y generosidad que gracias a su compañía veremos recompensado con creces. No todos los días se tiene un héroe en casa.