El lío de la presentadora Sonia Ferrer con el empresario y jinete Álvaro Muñoz Escassi ha sido uno de los grandes temas de la prensa del corazón a raíz del estreno de ¡Mira Quién Salta!. Un tonteo que, tal y como expone Diez Minutos, ha resultado fatal para la presentadora, casada con el prestigioso cirujano Marco Vricella.
Los rumores que han vinculado a la presentadora con Escassi han coincidido con una crisis matrimonial previa, expone la revista, y sólo han complicado la situación para ambos. En las imágenes que ilustran el reportaje de Diez Minutos, tanto Ferrer -que negó el romance- como Vricella aparecen paseando con su hija pequeña muy serios y distantes, sin guiños ni risas, en una actitud muy distinta a la que exhibían anteriormente.
Los tres salieron a pasear por el centro de Madrid en vísperas de Semana Santa. Sonia Ferrer con unas gafas de sol y el gesto serio, al igual que él. Según la revista, Vricella se lo reconoció a Lydia Lozano a los pocos días de darse a conocer el rumor, asegurando que lo llevaba "fatal".
La propia Ferrer amenazó en principio con tomar medidas legales contra los medios que dieron a conocer el acercamiento entre ella y Escassi, pero luego dio marcha atrás. "No voy a poder negar ciertas imágenes que van a salir. Ha podido haber un tonteo que se me ha podido escapar de las manos". No obstante, ella mismo dijo que "ya sabes cómo es Álvaro y lo que yo te digo es que la historia queda ahí".
Según fuentes de la revista, una persona muy cercana al matrimonio asegura que en los últimos meses éste no era tan idílico como parecía, dando a entender que una hipotética ruptura no sería culpa de Escassi. El carácter difícil y los continuos viajes del cirujano habrían influido en la unión entre ambos.
Aunque la grabación del programa ya ha acabado, y también la convivencia de los concursantes, se comenta que Sonia y Álvaro se han seguido viendo. Hay testimonios que aseguran que la pareja, acompañada de otras personas, almorzó el fin de semana pasado en la localidad segoviana de Pedraza. Y la anterior, Álvaro organizó una cena en su restaurante a la que asistió Ferrer.