De esta dinastía israelí se sabe muy poco. Prefieren mantener en el anonimato todo lo que les rodea. Pero el abolengo de la familia Aga Khan llegaría hasta el profeta Mahoma y líderes espirituales de los musulmanes ismaelitas nazaríes.
Es por ello que la boda del príncipe Rahim Aga Khan con la modelo Kendra Spears, una de las maniquíes con más prestigio del panorama internacional, ha sido uno de los principales acontecimientos sociales del fin de semana. Ha desfilado para prestigiosas marcas como Chanel, Louis Vuitton y Valentino. Al igual que la ceremonia de Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo, su enlace ha estado blindado.
Lo poco que se sabe de la boda es que tuvo lugar el 31 de agosto en Ginebra bajo el rito musulmán, en la misma residencia del difunto príncipe Sadruddin. La novia ha tenido que convertirse al islam para poder casarse. Por otro lado, Spears -que a partir de ahora recibirá el nombre de princesa Salwa- deberá abandonar las pasarelas y convertirse al Islam antes de contraer matrimonio. Kendra Spears se dedicará de pleno a las fundaciones de la familia.
El heredero Rahim Aga Khan es hijo del íntimo amigo del Rey Don Juan Carlos, el príncipe Karin Aga Khan. Ahora, es el encargado de ayudar en todo lo que pueda a la infanta Cristina, por su mudanza a Ginebra, razón por la que se especuló que la hija del Rey podría haber estado invitada a la boda, o haber asistido al evento. Lo que sí es seguro es que asistieron numerosas personalidades de todo el mundo, aunque la lista de invitados no ha sido publicada.