El pasado 18 de noviembre, Lina Morgan fue ingresada en el Hospital Beata María Ana de Madrid, por vómitos e insuficiencia respiratoria. Después de dos semanas en la UCI, la artista se va recuperando. Parece que está respondiendo bien al tratamiento prescrito por los médicos, aunque, según informa Pronto, Lina permanece sedada.
A la única persona que se le permite visitarla es a su amigo y chófer Daniel Pontes, que acude media hora por la mañana y por la tarde para ver cómo está. La publicación habló con esta persona de mayor confianza de Lina Morgan -Daniel Pontes- y explicó que "Lina sigue sedada y parece que responde bien al tratamiento. Yo me siento más optimista que hace unos días, la veo con mejor cara. Pero, como no soy médico, me puedo equivocar. Lo que tengo más claro es que deseo que se ponga bien lo antes posible y que salga de la UCI. No quiero acosar a los médicos con preguntas, que ellos hagan su trabajo tranquilos".
Otra de las confesiones que dio a la revista fue: "Mi jefa solamente tiene un amigo que se llama Daniel Pontes". Y es que, el chófer aseguró que él era el que está más cerca de la artista. Reveló que ha estado a su lado "para lo bueno y para lo malo" y que le "hace mucha gracia" que ahora aparezcan supuestos amigos de toda la vida de Morgan, cuando nunca los había visto.
En el último año, la artista ha sido ingresada tres veces por problemas de salud. Todo apunta a que todas estas dificultades vienen a raíz de la gran depresión que padece la artista tras la muerte de su hermana Julia, el pasado 24 de noviembre de 2012. Tenían una relación muy estrecha y todavía no ha podido superar su pérdida.