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Carlos Pérez Gimeno

Genoveva Casanova muestra su faceta mas desconocida

Cuando Genoveva habla de sus hijos se le cambia la cara: "Ya son adolescentes y son conscientes de las miserias y necesidades que hay en el mundo".

Cuando Genoveva habla de sus hijos se le cambia la cara: "Ya son adolescentes y son conscientes de las miserias y necesidades que hay en el mundo".
Genoveva Casanova, fotógrafa

Genoveva Casanova, además de trabajar en la Fundación Casa de Alba, es una persona comprometida en proyectos de índole humanitaria. Colabora desde hace años con la ONG Acnur en diferentes países del tercer mundo. En ellos ha ido recopilando una buena colección de fotografías en las que recoge los momentos vividos a lo largo de estos 10 años. Desde hace un tiempo ha expuesto ese trabajo en varias ciudades españolas y los fondos que recauda van a parar a dicha organización.

El último lugar elegido ha sido el Sha Wellness Clinic, la clínica de bienestar y estilo de vida saludable, ubicada en la provincia de Alicante. "Elegí este lugar por amistad con sus dueños, la familia Bataller, todos trabajan en su propio negocio y la ampliación que están haciendo del centro para tratar el Alzheimer, entre otras enfermedades, me parece una maravilla", declaró la propia Genoveva.

En el trascurso de la exposición me comentó que regresará a la India por un periodo de 3 meses. Lo hará como voluntaria con las monjas de la Madre Teresa de Calcuta. "Hay una fundación y tiene un centro donde atienden a todo tipo de gente. En principio iré el mes de agosto, y regresaré cuando mis hijos comiencen el curso escolar, después me volveré a marchar. Mi hijo Luis está deseando ir pero no puede ser por tener que viajar a Dinamarca, por un tema familiar, pero le he prometido que lo haremos en otra ocasión y muy pronto".

Cuando Genoveva habla de sus hijos se le cambia la cara: "Ya son adolescentes y son conscientes de las miserias y necesidades que hay en el mundo, y cuando viajan con su padre a Kenia siempre compran cosas para los niños de allí. A mí no me importaría irme a vivir con ellos a la India, pero me imagino que a su padre no le haría ninguna gracia", comentó entre risas.

A pesar de su divorcio de años, Genoveva y Cayetano Martínez de Irujo, han conseguido mantener una buena relación, y juntos se preocupan por la educación de sus hijos. "Yo estoy más pendiente de los estudios y soy más exigente que su padre, que por el contrario, se fija mucho más en el orden, nos complementamos bien", matizó.

Con la que fuera su suegra, la duquesa de Alba con la que siempre ha mantenido una excelente relación, comentó que la había ido a visitar a Sevilla, hacia unos días. "La quiero mucho, la encontré mayor, pero es una mujer muy fuerte, y el haber sido su nuera me llena de orgullo", comentó con ternura.

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