La Reina celebró su onomástica trabajando en el Senado, en la entrega del Premio Luis Carandell de Periodismo Parlamentario a la periodista de La Vanguardia Carmen del Riego.
A su llegada al acto en solitario que presidió en el Senado, Letizia agradeció la "fiesta de cumpleaños" que le iban a brindar sus antiguos compañeros de profesión.
Letizia Ortiz quiso dedicar su discurso al periodismo y la veracidad. Ha hecho un elogio de "los periodistas valientes que dicen no, que se plantan" para salvaguardar su independencia y proteger su oficio con "seriedad, rigor y verdad", porque, según ha subrayado, son una "pieza clave" en la democracia española.
Además ha dado las gracias a "esos periodistas que siguen creyendo en el periodismo, en la crónica reposada y analítica, que siguen pensando que ser el primero no es sinónimo de ser el que mejor lo cuenta, esos que pretenden devolver a la información a su verdadero valor".
Aviso a navegantes
Letizia ha mandado un mensaje a todos aquellos que juegan a ser periodistas, o que hacen fotos para luego comercializar con ellas. Una guerra que inició hace años, y que hemos conocido por testimonios de los afectados que podemos creernos o no: una señora que tuvo que borrar las fotos de la Reina comprando ropa de deporte en Decathlon, una reportera que fotografió a sus hijas durante una Cabalgata...
La Reina ha dicho en su discurso que, a pesar de que todos los ciudadanos pueden fotografiar y contar lo que ocurre con su teléfono móvil, siempre será necesaria "esa persona inteligente y responsable que analice, interprete y sintetice en un puñado de imágenes, palabras, sonidos, esas cosas que pasan; y eso sólo lo puede hacer un buen periodista". Sin dobles sentidos.