Vicky Martín Berrocal ha presentado una colección limitada bajo el título de Violeta by Mango para dicha marca, compuesta por seis vestidos de cocktail fruto de su creación.
Por tal motivo, como ella misma ha manifestado, estaba feliz. "Hoy es un día muy especial para mí, ya que cumplo 42 años, y reconozco que estoy en un buen momento de mi vida".
No tuvo ningún problema en responder a todo tipo de preguntas, pero en el momento que se nombró a Anna Allen, la actriz que inventó su asistencia a la gala de Los Oscar, a la sevillana se le cambió la cara, al haberle diseñado un vestido para que lo luciera en esa ocasión tan señalada. Cuando se enteró que todo había sido una farsa, decidió ignorar lo ocurrido. "No voy a hablar de eso, paso palabra", fue su respuesta, y pidió por favor no insistir en el tema. "Es una persona que no forma parte de mi vida, y no tengo nada que decir", así dio por zanjado el tema.
Vicky disfrutó mucho en la presentación y se encontró con la sorpresa, cuando de repente apareció su amigo Juan Peña, cantándole Cumpleaños Feliz. Al verle, se dieron un fuerte abrazo y la homenajeada se emocionó." Hoy espero celebrarlo con mi hija, madre y hermana, espero que vengan de Sevilla, me han dicho que no podían, pero no me lo he creído", comentó ilusionada.
La diseñadora es una mujer imparable, y ya está metida de lleno en la próxima colección de novias que presentará dentro de unas semanas. "El amor por la moda me lo inculcó mi madre y a mi hija Alba también le gusta, tiene 15 años, en plena adolescencia, y según me ha comentado, le gustaría ser periodista", declaró.
A lo largo de la conversación que mantuvimos, contó que su corazón está revolucionado, y que ha aprendido a ser paciente y a amar a cambio de nada, sin revelar quien era la persona que le tenía de esa manera. "Si llegara el hombre adecuado, no me importaría volver a ser madre, pero de momento no entra en mis planes más inmediatos". Y con estas palabras, se despidió.