El presidente mexicano Enrique Peña Nieto y su esposa, la exactriz Angélica Rivera, podían estar al borde de la separación. La discordia, explica ABC, podría estar en la denominada "casa blanca", un inmueble de cinco millones de euros a nombre de una constructora que ganó varios contratos mientras Peña era gobernador de México. Tras descubrirse el escándalo, fue Rivera y no el primero quien dio explicaciones públicas.
Hasta ahora no parecía haber repercutido en la relación matrimonial, pero el asunto se tornó más personal este verano, con ambos pasando una parte de las vacaciones por separado y la prensa del país incidiendo con fuerza en esa crisis matrimonial.
Fue durante, precisamente, durante la visita de los Reyes de España al país, y el acto al que asistieron con el presidente de la primera dama en el Museo Virreinal de Guadalupe, cuando todo comenzó. Allí Rivera intentó dar el brazo a su marido pero éste lo rechazó para ceder el paso a Leticia y Felipe. Un detalle que no pasó inadvertido para la prensa, que observó el discreto enfado entre ambos. Cuando Peña Nieto da el brazo a su mujer, finalmente ésta lo rechaza.
Más tarde la situación casi se repitió durante la visita de estado de Peña Nieto a París con motivo de la fiesta nacional francesa. Al salir del coche Rivera, Peña Nieto le ofrece el brazo, y su esposa lo rechaza altivamente, justo antes de ser recibidos por Hollande. El pasado lunes 13 de julio la periodista Fernanda Familiar lo sacó a colación estos desplantes en su programa ¡Qué tal Fernanda!, y profundizó por primera vez en ellos. Lejos de ser detalles, darían a entender una verdadera crisis matrimonial.
Ahora, las vacaciones por separado de ambos han hecho saltar las alarmas de nuevo. Rivera se encontraba en Verona junto a su hermano, mientras Peña Nieto regresaba a México para cumplir sus deberes presidenciales. En México, mucha gente da por hecho que algo ocurre entre "La Gaviota" (apodo de Rivera por su labor como actriz en la telenovela Destilando amor) y el presidente, que tampoco está atravesando su mejor momento político.