Menú

Frank Sinatra engañó a todas sus mujeres

Frank Sinatra nació un 12 de diciembre de 1915, hace ahora un siglo. Y siempre fue un seductor impenitente.

Frank Sinatra nació un 12 de diciembre de 1915, hace ahora un siglo. Y siempre fue un seductor impenitente.
Sinatra y Mia Farrow | Corbis Images

Se suceden estos días artículos evocadores sobre el centenario del nacimiento de Frank Sinatra, que vino al mundo en Hoboken, estado norteamericano de Nueva Jersey, el 12 de diciembre de 1915. Su historial amoroso lo convierte en un impenitente seductor. Ya en 1938 fue acusado de haber seducido a una joven a la que había prometido matrimonio. Menos mal que el juez descubrió que quien lo acusaba era una señora casada. Un año después Francis Albert Sinatra contraía matrimonio con Nancy Barbato. Tuvieron tres hijos: Nancy, Frank y Tina.

Para entonces, su colección de conquistas femeninas era más que notable. Por ejemplo, Lana Turner, a quien admiraba desde que la vio en la película El cartero siempre llama dos veces. Estaba enamorada por entonces de Tyrone Power pero cuando encontró a Frank Sinatra fue una bomba. Convivió con aquella consagrada estrella una larga temporada, hasta que se cansó. Luego entró en su vida Ava Gardner. Se habían conocido en 1945 en un club nocturno de Los Ángeles, cuando todavía era esposa de Mickey Rooney. Pasaron tres años cuando Frank la invitó por vez primera a salir. Fueron a cenar, bebieron sin mesura y acabaron locos el uno por el otro. Su boda fue en 1951, año en el que obtuvo su divorcio de Nancy Barbato. Hasta 1957, fueron seis años tan apasionados como tormentosos.

Sinatra y Ava Gardner | Corbis Images

Prescindimos de cualquier detalle considerando que la historia de ese segundo matrimonio de Frank Sinatra ha sido ya suficientemente divulgada. Entre medias tanto ella como él vivieron otros romances, sobre todo nuestro galán cantante quien, en 1956 se prendó de su compañera de reparto en "Alta sociedad", Grace Kelly, a la que él llamaba amistosamente Gracie. Se habían conocido en África con ocasión del rodaje de Mogambo, cuando Frank acudió para reunirse con Ava Gardner. La noche en la que invitó a Grace a salir a cenar a un restaurante de Los Ángeles estaba notoriamente bebido y no se le ocurrió otra cosa en un momento de la velada que abalanzarse groseramente sobre ella, quien afeó bruscamente su zafia conducta. Fue inútil que al día siguiente él le pidiera perdón por teléfono. Jamás volvieron a salir. Olvidado el incidente, ya siendo princesa de Mónaco, Frank Sinatra fue invitado de honor en una de las fiestas anuales de la Cruz Roja en el Yacht Club de Montecarlo.

El año 1956 le fue pródigo en amores con tres destacadas actrices. La primera, Judy Garland, con quien Sinatra se encamó de vez en cuando hasta que se hartó de aquella, siempre a merced de las drogas y la bebida. También por entonces se acostaba Frank Sinatra con Kim Novak, que fue su pareja en El hombre del brazo de oro y Pal Joey. Y la tercera en acción fue Lauren Bacall. Quedándole pocos meses de vida, Bogart, celoso perdido, sospechaba que su amada esposa Lauren le era infiel. Lo que resultó ser cierto por mucho de que Frank fuera buen amigo suyo, y del que Humphrey decía que de no estar todo el día detrás de unas faldas podría haber sido uno de los más grandes en su profesión. El caso es que muerto el protagonista de Casablanca en 1957 Lauren Bacall y Frank Sinatra aparecieron ya en público sin disimulo. Ella le pidió matrimonio, accedió él pero cuando Lauren cometió la indiscreción de comentarlo con una influyente periodista de chismes, enfurecido el cantante rompió el compromiso, aunque sin decirle nada a la Bacall. Tardaría esta en reponerse de semejante desplante. Se dijo que le caía mal a la madre de Frankie y que no paró hasta que éste se convenció de que no era la mujer apropiada.

Durante el rodaje en España de Orgullo y pasión, Sinatra "le tiró los tejos" a Sofía Loren, pero la italiana no cayó en sus redes amatorias, sabiéndose segura y enamorada de Carlo Ponti. No nos olvidamos de Marilyn Monroe. Intimaron cuando ella echaba de menos a Joe di Maggio, su ex marido y él a Ava Gardner. Lo curioso es que la explosiva estrella se fue a vivir una temporada a casa de Frank Sinatra y se pasaban las horas sólo hablando, consolándose de sus respectivas desgracias matrimoniales. Tenía Marilyn la costumbre de ir desnuda por la casa a todas horas. Y una madrugada, tomándose un zumo en la cocina coincidió con Frank, también insomne en esos momentos. Fue cuando ya dejaron de intercambiar los relatos de sus respectivas penas para acabar en el lecho. Y como ella continuaba en bolas a diario, fueron repitiendo aquellos encuentros. También Marilyn lo presionaba para que se casaran, hasta que Frank optó por alejarse de aquella perturbadora mujer, atiborrada siempre de pastillas. Con la que compartió escenas nunca repetidas con ninguna otra fémina: practicando el sexo en la terraza del hotel Sands, de Las Vegas o en las mismísimas pistas del aeropuerto de la ciudad del juego.

Con cincuenta y un años se prendó de los encantos de Mía Farrow, a la que llevaba casi treinta años de diferencia. Contrajeron matrimonio (el tercero de Frank) en 1966. Trece meses duró la experiencia, entre celos y pasiones mutuas. Frank Sinatra quería que Mía Farrow compartiera con él la cabecera de la película El detective, lo que a ella no le apetecía. Además, se había retrasado el rodaje de La semilla del diablo, donde estaba contratada de protagonista. El enfado de Frank unido a otro más gordo al enterarse que Mía había estando bailando una noche con Robert Kennedy, enemigo declarado del cantante, acabó con el divorcio de la pareja. Para entretenerse en esas semanas en las que estuvieron distanciados, él se refugió en los brazos de su compañera en El detective, Lee Remick.

Sinatra y su esposa | Corbis Images

Con peluquín, sintiéndose ya envejecido en 1970, prosiguió su vida donjuanesca. Fechadas en 1972 fueron sus aventuras con las actrices Victoria Principal y Hope Lange. En 1975, fue visto una noche en un hotel compartiendo habitación con Jacqueline Onassis, ya viuda del armador griego. Una hermana de John F. Kennedy, enterada de ello, afeó la conducta de su cuñada, a quien contó que en pasados tiempos Frank Sinatra le facilitaba al asesinado presidente más de una "starlette" en la propia Casa Blanca. Por lo visto, Jacqueline desconocía esa circunstancia. Nunca más se la volvió a ver del brazo de Sinatra. Quien acabó celebrando su cuarta y última boda en 1976 con Bárbara Marx (su apellido de casada con uno de los hermanos Marx, Zeppo). Frank Sinatra falleció a los ochenta y dos años el 14 de mayo de 1998 en Los Ángeles. Continúa siendo una leyenda.

Temas

En Chic

    0
    comentarios