Michelle Obama y sus hijas, Malia y Sasha, están en España para presentar la iniciativa solidaria Let Girls Learn, auspiciada por el Gobierno de EEUU. Pero, naturalmente, después de los actos oficiales del jueves, las dos hermanas utilizaron sus horas en Madrid paseando por el centro de la capital y visitando algunas de las tiendas de ropa de la ciudad, acompañadas por un amplio dispositivo de seguridad.
Malia y Sasha, antes de partir de vuelta este viernes, han recorrido la Gran Vía y visitado las rebajas de grandes centros como Primark, H&M y Lefties, tal y como muestran las fotos publicadas por Madridiario.es. Momentos antes de la entrada en el local, los guardaespaldas avisaban a los responsables de tienda, aunque sin aclarar la identidad de las "visitantes" por motivos de seguridad.
La noche del jueves, las chicas estuvieron junto a su madre y varios invitados, entre ellos el embajador de EEUU y su marido, en el prestigioso restaurante El Filandón, un establecimiento cerca de El Pardo, en la carretera de Fuencarral, donde degustaron salmorejo cordobés y una fresca ventresca de bonito, dos platos típicos de esta época del año, publica El Economista.
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— Madridiario.es (@Madridiario) 1 de julio de 2016
Como ya ocurrió en la visita de los reyes Felipe VI y Letizia a EE.UU, cada vez que la primera dama y nuestra majestad -a quien Michelle calificó como "su amiga"- se reúnen, el encuentro se convierte en toda una batalla de estilos.
Michelle Obama se ha coronado como una de las mujeres más elegantes del mundo y fiel a su estilo ha hecho un guiño a la moda española luciendo un vestido de la firma Delpozo, evasé con dos nudos en la cintura, que combinó con sandalias doradas y pendientes largos. Un gesto seguramente estudiado con el que ha querido demostrar su apoyo por la moda de nuestro país.
Pero nuestra moda patria tiene una clara embajadora y esa es sin duda la reina Letizia. En esta ocasión no iba a ser menos y se ha presentado a su cita con la mujer de Barack Obama con un vestido rojo drapeado de la marca española Nina Ricci, de su colección primavera-verano 2016.
Letizia optó por el rojo, el color que mejor le sienta, y lo combinó con unos salones nude de Prada y pendientes de la también firma española Tous en oro y diferentes piedras preciosas y semipreciosas.