Bradley Cooper e Irina Shayk acudieron juntos a la final de Wimbledon como dos aficionados más y acapararon todas las miradas. Las gradas están repletas de celebrities en las que fijarse, pero la pareja protagonizó un incómodo momento que captó una de las cámaras.
Durante el partido entre Andy Murray y Milos Raonic se les pudo ver charlando y comentando el partido, pero un vídeo difundido por Twitter dejó ver un momento íntimo de la pareja en el que se ve a la modelo muy molesta por algo, incluso se secó los ojos de forma discreta tras la riña con el actor.
Las fotografías y vídeos muestran que no era el mejor día de Irina, que acudió con cara larga. Aunque se ve cómo Cooper intenta hablar con ella, la cara de Shayk lo dice todo limitándose a mirarle y quedarse callada.
Bradley Cooper trying not to have a fight with his girlfriend in the middle of Wimbledon. pic.twitter.com/B6yZWWLJTX
— John Dabkovich (@JohnDabkovich) 10 de julio de 2016
La red se ha llenado de teorías sobre lo que habría podido ocurrir entre ambos, y la que suena con mayor fuerza es la que apunta a Suki Waterhouse como posible culpable de aquel momento. Suki, exnovia de Bradley, acudió a Wimbledon con su padre y se encontró de forma inesperada con Irina y el actor. El diario Daily Mirror apunta por su parte a que el actor estaba hablando con el extenista Stefan Edberg, que se encontraba sentado al lado de Irina y ésta, ajena a la conversación, se tocaba ligeramente los ojos porque tiene alergia.