La Lequiolist ha incorporado a su miembro más ilustre estos últimos días: Sonia Moldes. Ilustre sobre todo porque, a pesar de que apenas estuvieron dos años juntos (desde 1997 hasta 1999), fue una de las mujeres que más marcó a Alessandro Lequio. Aquella guapa morena de ojos verdes y físico espectacular encandiló a Lequio y a toda una generación de adolescentes (y no tan jóvenes) que suspiraban por su sonrisa. La joven se dedicaba al mundo empresarial y mantenía un perfil muy discreto.
Después de varios años desaparecida, la exnovia del conde ha vuelto a asomar la cabeza en las páginas del corazón para echar más leña al fuego y asegura que Lequio también le fue infiel con ella a su mujer María Palacios. Si siempre fue tan discreta nos preguntamos, ¿por qué reaparece ahora? Según ella, porque las duras críticas hacia Olvido Hormigos le parecen de lo más crueles.
Sonia y Alessandro fueron una de las parejas de moda a finales de los noventa. Los más curiosos seguían su noviazgo gracias a las páginas del cuore, y el morbo máximo llegó cuando la revista Interviú les pilló desnudos a bordo de un barco durante unas vacaciones y les llevó a su portada. Por aquel entonces, se especuló con que el propio aristócrata fue quien envió las fotos aposta, pero jamás se demostró. Las numerosas infidelidades por parte de ambos, que se han conocido años después, y sus diferentes formas de ser, terminaron con su relación.
Poco tiempo después, empezó a salir con María Palacios, una joven de familia "bien" y aristocrática de la que no se ha separado desde entonces. Sonia no quiso hacer sangre y decidió alejarse del foco mediático, aunque sí se dejaba caer por fiestas y eventos. Después de un largo periodo estuvo desaparecida. En 2008, volvíamos a verla en la presentación de su restaurante El 44. Ya por entonces su rostro había recibido los retoques del bisturí.
De nuevo, el silencio.
Y ahora, ocho años después, reaparece para seguir viviendo (o al menos intentarlo) de aquella relación que la trajo a nuestros vidas.