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La madre de Emma Ozores no quiso saber nada de ella y quedó bajo el cuidado de su padre

Emma, cuando tenía siete años de edad, fue depositada en casa de su padre con bolsas de ropa y una sirvienta. Antonio se desvivió por ella.

Emma, cuando tenía siete años de edad, fue depositada en casa de su padre con bolsas de ropa y una sirvienta. Antonio se desvivió por ella.
Emma y Antonio Ozores | Cordon Press

A punto de cumplir el 2 de febrero cincuenta y seis años Emma Ozores comparece en Gran Hermano haciendo gala de su extraordinaria simpatía, de las continuas risas que ha prodigado siempre. Una criatura que con sólo siete años de edad fue depositada en casa de su padre, adonde llegó con un par de bolsas de ropa acompañada de una sirvienta. Elisa Montés, su madre, parece que ya estaba harta de ella y nada quería saber en adelante, dejándola bajo la potestad en manos de Antonio Ozores, que hizo de padre y madre con su única hija.

Antonio Ozores y Elisa Montés contrajeron matrimonio en 1960 separándose después de ocho años de convivencia. Nunca adujeron públicamente las razones de su ruptura. Cuando pudieron divorciarse, lo hicieron encantados de la vida, y cada uno siguió con su pareja respectiva, que en el caso del actor cómico fueron varias a lo largo de los años, aunque él se ocupó de que los reporteros de las revistas del corazón lo dejaran tranquilo. Nunca iba a lugares donde presuponía iban a estar aquellos. En cuanto a ella llevó asimismo una vida discreta y sólo le conocimos una relación con cierto comentarista taurino de televisión, cojo por más señas. Elisa Montés se llama en realidad Elisa Rosario Ruiz Penella y eligió su apellido artístico tomado de su abuelo, el célebre maestro Manuel Penella, autor de la ópera "El gato montés". Es hija del tipógrafo y militante de la Ceda Ramón Ruiz Alonso, aquel que delató a Federico García Lorca cuando estaba refugiado en la casa granadina de la familia del poeta Luis Rosales. Dotada de una expresiva belleza, esta granadina de voz algo ronca, aunque no tanto como su hermana, Emma Penella, tuvo una notable aunque no extensa carrera en la pantalla. Se retiró en 1995. Cuenta en la actualidad ochenta y dos años.

Antonio Ozores, una vez que tuvo que aceptar, de buen grado eso sí, que debía ocuparse de su hija Emma, se desvivió por ella para que no le faltara nada, incluso en tiempos difíciles en los que él atravesaba por apuros económicos derivados de su inestable trabajo. Contaba estar representando un vodevil en el madrileño teatro Martín, y acabada la primera función, a las nueve de la noche corría hasta su domicilio para prepararle la cena a su hija, acompañarla al dormitorio, regresar al teatro para la segunda función, acostándose lo más temprano posible porque, a las ocho de la mañana tenía que estar despierto para bajar a su hija hasta el portal donde la recogía un coche para llevarla al colegio. Y así, unos cuantos años… Su hermano Mariano le preguntó un día cómo había resuelto el momento delicado en el que Emma "se hizo mujer", a lo que Antonio Ozores, respondió: "Me las apañé como pude. Lo malo fue el primer día que al respecto tuve que ir a una farmacia y pedir que me dieran una caja de esas cosas que no se mueven y no calan". Como magnífico padre "y abnegada madre" lo definía su citado hermano, el prolífico director de cine de comedias Mariano Ozores, quien también opinaba sobre su sobrina Emma: "De pequeña, muy difícil de carácter pero en cuanto se hizo mayor, una delicia, y muy trabajadora".

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Emma Ozores, en el escenario | Cordon Press

Emma Ozores pertenece a la sexta generación de una familia dedicada al arte de Talía. Nació en Madrid el 2 de febrero de 1961, cuando su padre estaba rodando en Cáceres una de las cerca de ciento ochenta películas en las que tomó parte, que ya es decir, La cuarta carabela. No querían darle permiso para que se trasladara a Madrid a abrazar a su bebé, que por cierto fue niña, como él quería. Pero Antonio Ozores se salió con la suya, se colocó al volante de su entonces Fiat 1100 y a todo correr se plantó en la clínica donde había dado a luz Elisa Montés. La que por cierto pocos días después tenía que incorporarse al rodaje de Salto mortal, que dirigía Mariano Ozores, su cuñado, y hubo de hacerlo en silla de ruedas, al no estar aún repuesta del parto. Cuando Emma Ozores decidió junto a su prima Adriana (hija del recordado José Luis Ozores) continuar la saga familiar, nadie se opuso, y así pudo debutar con la compañía de Zorí-Santos en la revista La casa de la Pradera. Y aunque intervino en representaciones de teatro clásico (La dama boba y La fierecilla domada) su carrera la desarrollaría en el campo de la revista y la comedia musical (Por la calle de Alcalá, que encabezaba Esperanza Roy, y Doña Mariquita de mi corazón, con María José Cantudo). Destacó asimismo en la comedia de Miguel Mihura, (una de las muchas reposiciones), Sublime decisión. Si en el cine apenas pueden mencionarse trabajos destacados en cambio en la televisión ha sido más frecuente su presencia en numerosas series: Anillos de oro, Colegio Mayor, Brigada Central, Farmacia de guardia, Una gloria nacional, La casa de los líos, Aquí no hay quien viva… Con su padre actuó en una obra cómica escrita por él, Achipe, achipé, y en la última que también firmó, El último que apague la luz. A la muerte de Antonio Ozores en 2010 Emma continuó con la empresa familiar, en su papel de productora teatral y primera actriz, con una compañía que estrenó Cambalache.

La vida privada de Emma Ozores, siguiendo la misma tónica que su padre (seguro que la aleccionó sobre el particular) ha venido transcurriendo de manera que los rastreadores de noviazgos no han podido conocerle muchas historias. El idilio que conocemos como más duradero fue el que compartió con el veterano actor Nicolás Dueñas (padre de Lola Dueñas) exmarido de quien fue representante de Isabel Pantoja, María Navarro. Pero ella no se considera infortunada en el amor. Se encuentra muy bien soltera.

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