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Juego de sillas, miradas y celos de Podemos en el Congreso

Una fotografía tomada este martes en el Congreso se ha convertido en el resumen perfecto del juego de relaciones personales de Podemos.

Una fotografía tomada este martes en el Congreso se ha convertido en el resumen perfecto del juego de relaciones personales de Podemos.
La mirada de Montero e Iglesias a Tania Sánchez | Ángel Navarrete/El Mundo

La imagen captada por el fotógrafo Ángel Navarrete para El Mundo se ha convertido en un éxito en todas las redes sociales como la mejor representación de lo que está ocurriendo en Podemos: ese juego de egos, noviazgos y escaños en el que los que eran un grupo de amigos se comportan más como una pandilla que como un grupo parlamentario.

En la fotografía se ve a Tania Sánchez, expareja de Pablo Iglesias y siempre recordada por su frase "no voy a entrar en Podemos, no, punto", bajando por las escaleras del hemiciclo y soportando las miradas nada amistosas del propio Iglesias… y de la que ahora es su pareja además de flamante portavoz parlamentaria, Irene Montero.

Navarrete ha tenido la habilidad de tomar la fotografía en el día más oportuno: justo después de que se hayan escenificado en el pleno los cambios de escaño fruto de las purgas tras la derrota de los errejonistas en Vistalegre II. Así, el propio Errejón ha visto cómo perdía su silla en la primera fila de la bancada podemita a favor de Irene Montero, que ahora se sienta junto a su novio. Peor aún ha sido la venganza contra la ex: Tania Sánchez ha sido desterrada a la última fila del hemiciclo, donde ocupará a partir de ahora un incomodísimo escaño detrás de una columna.

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