Carlos Fitz-James Stuart parece haber encontrado en Silvia Bruttini a una mujer con la que compartir momentos de su vida, además de establecer con ella una relación de confidencias y complicidad. El duque de Alba y la bella italiana comenzaron su amistad este verano en Sotogrande, aunque ha sido ahora cuando hemos conocido la naturaleza de su relación su amor.
Hace unos días veíamos al duque de Alba en la Feria de Abril acompañado por esta mujer con la que se paseó por el Real y con la que parecía sentirse muy cómodo. Aunque muchos pensaban que eras las primeras imágenes de la pareja, lo cierto es que el pasado mes de agosto ya les pudimos ver juntos en Sotogrande.
Allí la pareja pasó un rato distendidamente charlando y tomando un refresco mientras mostraban una gran complicidad. Después decidieron navegar en el yate del hijo mayor de la fallecida duquesa de Alba, momento en el que les vimos caminando por el pantalán.
De esta manera, Bruttini ha estado alojada en dos de los lugares más importantes para el duque de Alba, como son el Palacio de Dueñas y la casa que posee en esta urbanización gaditana. Sólo faltaría verla en el Palacio de Liria, la auténtica joya de la corona de la familia.
Silvia Bruttini, de 51 años, es una conocida empresaria italiana que se dedica a la consultoría inmobiliaria y dueña de la empresa Home Sweet Home, que se dedica a la comprar-venta y alquiler de inmuebles de lujo.
Bruttini frecuenta las mejores fiestas que se organizan en Londres, ciudad en la que reside, por lo que conoce a muchas personas de la alta sociedad londinense, unos contactos de alto nivel que en España se repiten al intimar con los Alba, una de las familias de más rancio abolengo del país.
Carlos Fitz-James Stuart se separó de Matilde Solís en el año 2000 tras doce años de matrimonio del que nacieron dos hijos, Fernando y Carlos. Desde entonces no han sido muchas las mujeres con las que se le ha relacionado, y todavía ninguna ha conseguido convertirse en la nueva duquesa de Alba.