Desde que llegaran a la Casa Blanca, el matrimonio Trump ha sido cuestionado por las pocas muestras de cariño que se han dedicado de forma pública. Pocas son las ocasiones en las que hemos podido ver sonriente a Melania Trump lo que ha generado comentarios y rumores sobre su vida privada, más allá de su papel como esposa del presidente de Estados Unidos. Esta semana, los rumores sobre una posible vida paralela se han avivado debido a las declaraciones de una escritora británica que ha asegurado que Melania vive "encarcelada en un matrimonio" donde los pactos están a la orden del día.
Mónica Byrne es la autora que se ha mostrado crítica con la relación matrimonial de los Trump, acusando a Melania de engañar a su marido con el jefe de seguridad de Tiffany's, en la Torre Trump. Según la escritora, la relación empezó hace varios años y continúa en la actualidad. "Melania ha sido desgraciada e infeliz desde que su marido decidió postularse para la Casa Blanca", afirma Byrne. Además, relaciona la posible infidelidad con la decisión de la primera dama de continuar residiendo en Nueva York con su hijo, poniendo como excusa la finalización de los estudios del pequeño Trump.
A las acusaciones de la escritora se suman ahora las declaraciones de un exempleado del equipo de campaña de la familia Clinton que asegura que el matrimonio ya tenía firmados los papeles del divorcio, pero la victoria electoral del magnate hizo que los planes cambiaran y se renegociaran las condiciones de la unión, que llegaría a su fin tras la salida de Trump de la Casa Blanca.