Este viernes uno de los días más señalados del verano. La conocida pareja formada por Leo Messi y Antonella Roccuzzo se dieron el 'sí, quiero' más romántico entre las bodas de futbolistas recientes. Y es que la suya es una auténtica historia de amor digna de una película de Hollywood.
Rosa Clará ha sido la seleccionada para diseñar el vestido de novia de Antonella. Antecesoras como Melissa Jiménez escogieron a la misma diseñadora para su modelo. Por su parte, el jugador del FC Barcelona irá vestido con un diseño de alta costura de Armani.
El escenario fue el Hotel City Center-Casino, un negocio de lujo que se impuso a la opción inicial del Hotel Puerto Norte de Rosario. El cambio fue tan inesperado que las tarjetas con la otra dirección ya habían sido enviadas. Para proteger el perímetro, un nutrido grupo de 300 agentes de seguridad –informa Clarín–, de máximo nivel y pasaporte israelí, pidieron identificaciones y vigilaron muy de cerca todo lo que ocurra dentro y fuera de la ceremonia. Los registros en la propiedad previos a la boda fueron todo lo meticulosos que cabría esperar.
La pareja decidió contratar a 3.000 miembros de seguridad que cubrieron todo el enlace. Y si esto no fue suficiente sorpresa, se calculó que se realizaron un total de doce vuelos privados a la ciudad del Rosario.
La cantante argentina y novia del Kun Agüero, La Princesita Karina, no sólo fue una de las principales invitadas sino que, además, fue la encargada de poner música al enlace. Su padre Diego Maradona no fue invitado a la celebración. Messi no le tiene ninguna simpatía a Diego Armando, ni como seleccionador ni como persona. Una de las grandes incógnitas era Shakira, que finalmente acudió a la ceremonia con Piqué.
Hubo ausencias notables de última hora, como Ronaldinho y Yanina Screpante, la mujer del futbolista Ezequiel Lavezzi, toda una figura en su país.