Tras lo publicado en los últimos días, fuentes cercanas a Angelina Jolie y Brad Pitt han confirmado que el proceso de divorcio sigue su curso y que la supuesta reconciliación de la que hablan los medios está muy lejos de la realidad.
Los informadores de ambas partes fueron tajantes con el portal TMZ, al asegurar que ambas partes siguen luchando por la custodia de sus hijos y el reparto de sus propiedades, y que ninguno se plantea darle a su historia una segunda oportunidad.
Una de las razones por las que no habrá segunda parte para la pareja son las acusaciones realizadas por el entorno de la actriz, en las que se señaló al intérprete como extremadamente perjudicial para sus hijos.
Las investigaciones llevadas a cabo por la policía de Los Ángeles y por el FBI exoneraron al productor de 53 años, pero dejaron una profunda cicatriz emocional que le distanció más de la madre de sus hijos.
Asimismo, Pitt no ha ocultado sus intenciones sobre los seis niños, que están en lo alto de su lista de prioridades en la separación legal, las mismas que la madre, por lo que estamos ante un proceso que tardará de dirimirse en los juzgados.
Aunque en estos momento, la pareja parece estar poniendo todo de su parte por el bien y el futuro de sus vástagos.