Victoria Federica, la hija pequeña de la infanta Elena debutó el verano pasado con sus primeros compromisos sociales acudiendo a una fiesta de gala por la mayoría de edad de un amigo en el club de El Buzo de El Puerto de Santamaría. Desde entonces, se la ha podido ver en diferentes ocasiones saliendo en solitario.
Según publica La otra crónica de El Mundo, Victoria Federica acudió al centro de Madrid el día 12 de enero, sobre las once de la noche, por las calles de Chamberí junto a un amigo con el que se mostró muy compenetrada.
No hubo beso, pero la actitud de los jóvenes era cariñosa, paseando en ocasiones de la mano. Su amigo especial se llama Miguel Gómez, tiene 20 años y es miembro de una afamada familia de Jerez de la Frontera, Cádiz. Julio Mendoza, bisabuelo del amigo de Victoria, fue maestro en una escuela situada en el parque del Retiro, en Jerez. Su hijo, Julio Mendoza, abuelo de Miguel, estudió Medicina y fue médico titular de las plazas de toros de Sanlúcar de Barrameda, El Puerto de Santamaría y Jerez.
Desde entonces, la familia mantiene una relación fraternal con los descendientes del ganadero Álvaro Domecq. De hecho, las redes sociales del joven están repletas de fotografías en capeas con amigos, por lo que ha heredado el gusto por la tauromaquia, que le viene de familia. Una afición que comparte con Victoria Federica, que ha heredado la pasión de su madre y su abuelo. Además, los jóvenes comparten el gusto por la hípica.