Menú
Nora Navas, mejor actriz

La prensa abuchea parte del palmarés de la SEMINCI

La holandesa Matterhorn se hace con la dirección novel mientras Una familia de Tokio se alza con la Espiga de Oro.

La holandesa Matterhorn se hace con la dirección novel mientras Una familia de Tokio se alza con la Espiga de Oro.
El director holandés Diederik Ebbinge (i), autor de "Matterhorn", y el realizador argentino Juan Taratuto, autor de "La reconstrucción".

La 58º edición del Festival Internacional de Cine de Valladolid (SEMINCI) ha hecho público su palmarés. Unos premios recibidos en su mayoría con fuertes pateos y la extrañeza del jurado, sobre todo de su presidente, que no entendía por qué estos galardones eran abucheados prácticamente por la gran mayoría de los periodistas presentes en el certamen y que como es lógico han visto todas las películas.

Así lo peor de todo ha sido el dar un premio a la mejor Dirección de Fotografía a una película que nunca podremos ver ni en vídeo ni en TV a no ser que la iluminen ya que Night moves es un film en el que uno adivina porque os podemos asegurar que no se ve casi nada a lo largo de toda su proyección. En fin, un despropósito total.

El mismo que el premio como mejor actor para el polaco Zbigniew Walerys por Papusza. Un personaje que no es protagonista y que no deja de ser un mero comparsa de su protagonista femenina, auténtica reina del film ya que está en todo el metraje de la película y que imaginamos ha sido la rival más clara para la española Nora Navas, que ha sido quién se ha llevado el premio a la mejor actriz por Todos queremos lo mejor para ella y que el público puede comprobar ya que se ha estrenado en toda España este fin de semana.

En cuanto al director nos quedamos con el otorgado a la mejor dirección novel, premio Pilar Miró, para Diederick Ebbinge por Matterhorn que demuestra la valentía, la sencillez y la originalidad a la hora de enfrentarse a un proyecto que evidentemente los hermanos Krauze, premio a la mejor dirección, no lo han logrado ya que son los responsables de ese despropósito absoluto además de aplastante y aburrido film llamado Papusza.

Finalmente fueron muy aplaudidas las Espigas de Plata y Oro que han recaído respectivamente en la película irlandesa Run and jump, un relato optimista sobre la conexión humana a través de la aceptación y Una famila de Tokio, grandísimo film de nacionalidad japonesa basada en un clásico de Yasujiro Ozu y que hace que el cineasta japonés Yôji Yamada sustituya el escenario de la historia original llevándolo hacia un terreno marcado por las buenas intenciones y la brecha generacional que el paso del tiempo y la confrontación entre la urbe y el mundo rural hacen que sean las claves que conforman la Espiga de Oro de esta 58º SEMINCI.

A lo largo de este festival os hemos ido contando lo que hemos visto, lo que nos ha gustado y lo que no, pero en definitiva podemos decir que ha sido una buena semana que el público ha llenado las salas con un incremento claro a pesar de los tiempos que corren frente a la edición del año pasado. Sólo nos queda desear que podamos volver a la 59ª edición y que os lo podamos contar.

En Cultura

    0
    comentarios