Jordi Hurtado es el presentador más longevo al frente de un mismo programa de televisión. Diecisiete años, nada menos, lleva Hurtado presentando Saber y Ganar en las sobremesas de La 2 para deleite de sus muchos seguidores. Sólo por eso Jordi merece el respeto y la admiración de compañeros y espectadores, pero es que además, Hurtado posee un talento oculto que sólo conocen los más fieles seguidores de su programa. Se trata de su facilidad para imitar a personajes conocidos. En su visita al programa de Antena 3 El Hormiguero, Jordi Hurtado hizo un alarde espectacular de esta habilidad, con atención especial a su imitación de Torrente, el singular detective creado por Santiago Segura. Impresionante.
El programa Supervivientes de Telecinco es una ocasión para que los concursantes, todos con una rica vida interior como es sabido, hagan un profundo examen de conciencia para depurar errores pasados y reconducir sus, en muchos casos, maltrechas existencias. Rodeados de mosquitos y de otros frikis, y con poco que hacer, la costa hondureña es un lugar que invita a la reflexión. Amador Mohedano está viviendo esta etapa de intensa introspección y ha llegado a la conclusión de que quiere volver con su ex churri, Rosa Benito. Aquí lo tienen, esforzándose por controlar el llanto, mientras recuerda lo maravillosa que era su vida con la Benito. Agotado el filón de su separación, un luminoso horizonte de exclusivas y desmentidos se ofrece ante la feliz expareja.
Cuarto Milenio es el programa de referencia para los amantes de lo desconocido. Iker Jiménez nos pone cada domingo al tanto de las últimas teorías conspiratorias y de los fenómenos extraños que ocurren sin cesar en todo el planeta Tierra. Esta semana conocimos el escalofriante caso del gallo nigeriano que, cuando iba a ser sacrificado en un mercadillo, comenzó a hablar en árabe (y seguramente también a jurar en arameo) para evitar su fatal destino. Como es natural la policía lo detuvo inmediatamente y lo trasladó a comisaría para someterlo a un severo interrogatorio.
Paz Padilla y Karmele Marchante son dos potencias intelectuales que cada tarde dan lo mejor de sí mismas en la franja cultural de Telecinco. Aquí tienen, para finalizar, un sesudo intercambio de reflexiones sobre la levedad de la existencia y la ontología del hecho informativo, rematado con una salida de tono de la Padilla contra los usuarios de Twitter. Regañada convenientemente por el pinganillo, la humorista-presentadora intenta pedir disculpas a los ofendidos con un resultado todavía más cochambroso de lo que es habitual en Sálvame.