Por fin llegó la deseada final de Gran Hermano Vip. Después de 74 días de concurso, los participantes tenían mucho que decirse y mucho de lo que hablar. Belén Esteban fue la ganadora del reality y tuvo que hacer frente a todos los conflictos abiertos que tenía. La gala estuvo marcada por las discusiones, los reproches y las correcciones.
La noche estuvo cargada de momentos únicos. Uno de los más destacados fue la tensión entre Ángela Portero y Belén Esteban. Cuando la periodista salió de la casa se enteró de que la Esteban había dicho que uno de los hijos de ésta era de Kiko Matamoros, algo que le ha afectado mucho. "Yo tengo una portada en la que digo que me has dado una puñalada por la espalda. Hoy es tu noche y, aunque he vitado por Santy, te voy a respetar", comenzó diciendo Ángela.
La periodista no pudo evitar decirle a la de Paracuellos que había sido "su mayor decepción" dentro de la casa. Belén no entendía de qué le estaba hablando y Portero acabó llorando explicándole que tiene hijos y que han tenido que escuchar cosas muy graves sobre ella."Yo no podría dormir si estuviera en tu lugar", explicó la periodista. Jordi confesó que la dirección del programa había decidido no mostrar ciertas imágenes por su fuerte contenido y Belén se quedaba sin palabras.
Otra situación inesperada fue cuando Belén prometió que iba a cambiar la relación que mantenía con Jesulín. Aseguró que dentro de la casa ha pensado mucho y que se ha dado cuenta de muchas cosas, como que no le lleva a nada tener una mala relación con el padre de su hija. "Él ha hecho cosas mal, yo también las he hecho, pero Andrea ya tiene quince años y no merece la pena que se siga perdiendo su vida", explicó la de San Blas. Prometió poner todo de su parte para que su hija tenga una buena relación con el diestro.
El cara a cara con Olvido Hormigos era lo más esperado de la noche. Ambas pelearon y continuaron con su guerra. "Yo la hice la vida imposible y ella me la hizo a mí", afirmó. La ganadora de GHVip pidió que le enseñaran los vídeos en los que llamaba mala madre a Olvido y en los que convencía a sus compañeros para que se pusieran en su contra. Al principio pareció que podrían acabar arreglando sus diferencias, pero comenzó una tensa discusión en la que Hormigos exigía que le explicara por qué se comportó así con ella. Belén, negándose a ser clara, le explicó que la convivencia con ella era insoportable y que Olvido había sido mala con ella. La de San Blas acabó disculpándose con los hijos de la expolítica "por todo el mal que había hecho" y la de Los Yébenes amenazando con que se iba del plató.
Recordando lo vivido dentro de la casa, uno de los vídeos era el de la pelea de Belén por las "cocretas". Entre risas, Jordi González no pudo evitar corregirle y explicarle que se dice "croquetas no cocretas", algo que no debió quedarle claro a Belén Esteban ya que cuando contó qué había pasado ese día volvió a decir "cocretas".