Noelia, la peculiar y parlanchina chica de Córdoba que se convirtió en habitante sorpresa de este Gran Hermano 17, ha sufrido su primer "orgasmo mental" en la casa. En cuanto enunció su curiosa afección en el vídeo de introducción de la primera gala, supimos que iba a pasar... y así ha sido.
Noelia, afectada con un 98% ASMR (Respuesta Sensorial Meridiana Autónoma) y, por tanto, capaz de sentir un placer casi sexual con sonidos o determinados estímulos táctiles cotidianos, se relajó al máximo con las cosquillas de Candelas en el antebrazo. Eso fue suficiente para que la cordobesa se quedase, como ella misma dijo, "muy a gustico" en el sofá.
Fue este pasado miércoles, muy cerca de la gala que culminará en la primera gran expulsión de la presente edición del concurso. Quizá los espectadores queden lo bastante enganchados a Noelia como para librarla del castigo...
La cosa sucedió con su amiga Candelas y Noelia sentadas en el sofá, descansando, cuando su compañera se puso a rascarle el brazo. Con ese leve cosquilleo la concursante de 21 años se quedó casi fuera de juego.
Noelia, natural de Doña Mencía, un pueblo de poco más de 4.000 habitantes en Córdoba, es una joven dicharachera que estudia Magisterio y que se sorprende por todo. Como, por ejemplo, cuando fue nombrada por Jorge Javier como una de las concursantes de la presente edición.
Ella estaba sentada entre el público de la gala y pensaba que formaba parte de la reserva, pero no sabía que había sido premiada con el honor de participar, como así fue. Su reacción fue uno de los momentos memorables de la gala, y aquí tenemos el segundo de sus puntos culminantes... nunca mejor dicho.