"Me encuentro fatal, hasta el punto de que si no me caigo redondo... No puedo más", dijo Bertín Osborne en plena grabación de su programa con Joaquín Sánchez. El equipo se vio obligado a detener la grabación de Mi casa es la tuya hasta que el cantante se recuperase.
La culpa, un proceso gripal muy avanzado y el cansancio acumulado por un concierto el día anterior, que obligó a Bertín a pedir que le inyectasen algo para poder subir al escenario y continuar con la actuación.
Una vez el concierto acabó, sin embargo, la gripe siguió haciendo mella en la salud del cantante que, no obstante, al día siguiente grababa el programa con el jugador del Betis.
El propio Joaquín alabó su profesionalidad, pues se negó a retrasar la grabación pese a que su enfermedad era evidente, y dio la cara durante todo el proceso. "Ha aguantado el tirón como un buen profesional", alabó.