Buenos días, tal y como prometí aquí estoy de vuelta tras nuestras vacaciones que nos han llevado de Londres a Benicassim. Lo hemos hecho en un tiempo record: una semana y un día.

Para muchos de los mortales un descanso tan breve no es tal, pero para ti es más que suficiente, ¿verdad?.

A la vuelta de Benicassim estabas ansiosa por llegar a casa y ponerte delante de tu ordenador a tachar tareas, planes, compras realizadas así como a planificar el resto de los próximos meses.

Reconozco que para mí, como para el resto de la “gente normal”, ocho días de vacaciones son pocos, pero qué se le va hacer….Aunque haciendo memoria de lo acontecido la satisfacción es del cien por cien.

Nuestra estancia londinense estuvo marcada por el descanso nocturno, el madrugón mañanero y las maratonianas compras en grandes almacenes, tiendas de marcas y demás antros “chochis” del barrio del Soho.

No paraste de comprar; la verdad es que acertaste mucho en tu selección: pares y pares de zapatos, vestidos ajustados, bolsito Dior y una veintena de libros que van desde teorías sesudas a catálogos más que recomendables con toda la obra de uno de tus pintores favoritos Kenny Scharf, entre otros. Eso por no hablar de tus complejos vitamínicos y tus inseparables mallas negras de American Apparel. También hubo tiempo para visitar exposiciones de genios como Jeff Koons y el prerrafaelismo de Waterhouse. Una delicia. De nuestro periplo por tu ciudad favorita te dejo una foto que te tomé en la habitación de nuestro hotel (situado en pleno Picadilly, algo más que recomendable) la última noche a la hora de hacer las maletas. Milagrosamente te cupo todo en tus tres inmensos bultos de viaje.

Por mi parte, tampoco me quejo: Un libro titulado “Sex, drugs y rock&roll” con fotos impagables de todos los ídolos musicales en todo tipo de avergonzantes actitudes, un catálogo muy bueno sobre la relación de Andy Warhol y la televisión, un jersey de leopardo gris-plata junto a un par de botines de mucho tacón cubano (ya sabes que me he acostumbrado a las alturas y no hay quien me baje) y más de diez camisetas negras con mucho escote.

He de confesarte que me divertí mucho contigo; nos reímos a tutti plain y comimos mucho más. Un lujo Londres, como tú.

Al día siguiente de la vuelta a España, y como anuncié aquí, nos fuimos de peregrinación a Benicassim.

El primer día actuó Fangoria, con gran éxito de público y un sonido espectacular. La aparición final de Nancys Rubias cantando “Amante Automático” fue apoteósica, al menos para nosotros. Espero que para vosotros también lo fuese.

A partir de ese momento, para servidor, el resto del mundo, horarios y demás dejaron de existir. Tú estuviste viendo a Oasis y al grupo Glasvegas, que te gustaron por igual. Por mi parte estuve deambulando por la zona vip y backstage saludando a los chicos-camareros de las barras que una vez más me mimaron como de costumbre; a su vez me hacía fotos con quien me lo pedía y por supuesto no paraba de perseguir a los famosos que por allí veía pasar. Me dio tiempo de charlar animadamente con Paloma y Carolina (su compañía fue de lo mejor) hasta terminar a las tantas junto a Vanessa y parte de Nancys, Miguelito, Eli, Parla y Montanchez en la habitación del hotel Orange (donde ya somos huéspedes honoríficos). El día siguiente lo pasamos en la piscina y justo cuando nos disponíamos a arreglarnos para ir a ver a THE HORRORS, Valentín y Alvarito (los fibers por excelencia) nos dieron la peor noticia del festival: un fuego y un viento huracanado habían obligado a suspender los conciertos programados para ese día. He de reconocer que me dio mucha rabia no poder ver a The Horrors en directo; su último disco me encanta y además Vanessa (íntima de ellos) había organizado una post-party en la piscina, ¿recuerdas la de hace dos años?.

Una vez recuperados del disgusto, el sábado estuvo presidido por una muy tranquila velada en el hotel y un super concierto de FRANZ FERDINAND. Nos encantó a los dos. Me parecen que son el grupo perfecto: buenas canciones, buena actitud y mejor imagen. El final con sonidos analógicos fue espectacular. Al día siguiente me encontré en camerinos con el cantante (un chico más que guapo) y me hice una foto junto a Montachez (él es fan-fatal).

Los que no me gustaron nada fueron THE KILLERS. ¡¡Qué pesadez de actuación!!!; Sólo me parecieron interesantes sus dos singles más famosos. The Killer me recuerdan al típico grupo tipo U2, aunque estoy más que seguro que las más de 40.000 personas que vieron su show pensarán que estoy loco al afirmar esto.

Tú disfrutaste de lo lindo viendo a los Planetas, que por cierto, Erick (el batería) es todo un descubrimiento; nos reímos sin parar con él y su mujer.

Parece ser que los hermanos Morán (los verdaderos artífices de este gran festival) se despedían este año dando el relevo a los organizadores ingleses. No quiero ser pesimista pero creo que este va a ser nuestro último FIB. Aunque el sabor de boca no puede ser mejor. Si las próximas ediciones van a seguir con el mismo espíritu que los Morán han dotado al evento más esperado por muchos ni que decir tiene que no me lo pierdo por nada del mundo, pero ¿ quién sabe?.

Tú eres muy partidaria de los cambios, sin embargo siempre he mantenido que cuando algo va bien mejor que se quede tal y como está…..Ya veremos.

Lo que sí está claro es que el FIB nos ha hecho muy felices en los cinco años que hemos sido asiduos. Es más, el año pasado mientras veíamos el concierto de THE KILLS (con gran momento de comunión entre tú y yo) la inspiración te hizo escribir la letra de “En el centro del Universo”. Solo por eso el FIB merecerá la pena de por vida. Solo por eso si nuestras vacaciones se reducen a ocho días, ¡¡benditas vacaciones!!. Me doy por satisfecho. ¿Qué más se necesita?.