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En busca de la exclusividad del mobiliario de Ikea

Los muebles de Ikea tienen innumerables ventajas, pero a cambio resultan poco exclusivos. Te mostramos cómo lograr mejorarlos.

Los muebles de Ikea tienen innumerables ventajas, pero a cambio resultan poco exclusivos. Te mostramos cómo lograr mejorarlos.
Una habitación de Ikea | Flickr/Adam

Reconozcámoslo. Hoy en día, cualquiera tiene un mueble con sello de Ikea en casa. La grandísima mayoría ha disfrutado en su ‘viaje’ a la inmensa tienda de Ikea y ha confiado en su marca para amueblar, redecorar o acoger algún nuevo compañero en su casa. Una fama mundial que se debe su excelente calidad-precio. Sin embargo, ¿a nadie le ha pasado encontrarse con un amigo o un vecino que tiene exactamente el mismo mueble? Pero aunque desconozcas esta casualidad, sabes que es más que probable que cientos de personas tengan en su dormitorio la misma cómoda que parecía tan exclusiva en la fotografía del catálogo.

Ha llegado el momento de ponerle fin a esto. Una vez pasado el reto de saber cómo montar el mueble, ahora toca enfrentarse al reto de personalizarlo. La primera opción es ensuciarse las manos, sobre todo para aquellos más habilidosos con el pincel. Pero siempre hay otra alternativa. Existen algunas empresas, como la americana O’verlays (envía a todo el mundo), que sacan su línea de propuestas especialmente para productos de Ikea.

Es decir, esta marca en concreto, se dedica a vender todo tipo de paneles decorativos, completamente planos, con relieves o con huecos. Pero además, y esto es lo mejor, se pueden pintar y ‘customizar’ para luego adherirlos a cualquier pared, mueble, espejo o superficie posible. Por tanto, tienen su selección concreta de algunos muebles de Ikea con sus distintas opciones disponibles, propuestas por ellos mismos.

Pero como esta empresa, se pueden encontrar muchas más que dispongan de paneles, o realicen tus ideas a medida. Hasta hay quienes se dedican especialmente a fabricar patas y tiradores más bonitos y divertidos para estos muebles. Aunque unos auténticos clásicos para estas situaciones, suelen ser las tiendas de vinilos decorativos para algunas superficies. Incluso está, lo más fácil de todo, la opción de tapizar a nuestro gusto el sofá o la silla para terminar de combinar y personalizar cada habitación.

Y así es como, sin dudarlo, muchas empresas han sabido aprovechar el terreno en el que Ikea se despreocupa. Aunque lo mejor es que todas las ideas y técnicas para personalizar tus muebles se congregan en un blog dedicado a ello: Ikea Hackers. Y es que, siendo tan fácil como aplicar simplemente un bonito panel calado a los cajones, cualquiera se apunta ahora al ‘tuning mobiliario’ y al ‘hackeo’ de los productos de Ikea.

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