Tras el verano, la piel del rostro se muestra más apagada y en ocasiones llena de manchas que le restan vitalidad y la hacen lucir menos joven. A pesar del uso de fotoprotección muy alta, nuestra piel sufre intensamente en la época estival debido a la exposición solar al alto índice UVA y a más horas de luz. Además, al daño anterior, debemos añadir la deshidratación que se produce por el cloro de las piscinas y el fuerte calor.
Para recuperar nuestra piel en otoño, debemos llevar a cabo una serie de cuidados rigorosos en casa cada día y acompañarlos de tratamientos más específicos en consulta que contribuyan a revitalizar las zonas más dañadas.
Tal y como explica la doctora Cristina de Hoyos, dermatóloga y directora técnica de Clínicas Ceta, en nuestra casa lo más adecuado es insistir en el uso de antioxidantes todos los días, para tratar de reparar el daño oxidativo que produce el sol sobre las células de la piel. Además, tanto la vitamina C como la E, potentes antioxidantes presentes en la mayoría de los productos con este fin, tienen cierto efecto antimanchas, ayudando a disminuir su tonalidad. Aplicaremos estas sustancias por la mañana, para así poder tratar más intensamente por la noche. Encima de los productos antioxidantes, continuar con la fotoprotección muy elevada durante todo el año. Por la noche, hay múltiples productos destinados a revitalizar la piel, que contienen en su composición retinol como molécula principal para engrosar la piel y mejorar las manchas. Dependiendo de la edad de la persona y del daño en su piel, habrá que elegir un producto con más o menos cantidad de retinol.
En consulta, tendremos que evaluar cuál es el estado general de la piel y qué necesita. En determinadas personas que hayan perdido luminosidad, podremos indicar un peeling iluminador light, con muy poca recuperación tras él pero que requiere varias sesiones. Con ello lograremos que la piel luzca con más brillo y atenuaremos manchas leves. En aquellas personas con manchas oscuras y marcadas, tendremos que valorar que tipo de mancha es y ofrecer, o bien peelings más intensos que requieran una recuperación posterior más larga, o bien el uso de láseres que eliminen en pocas sesiones las lesiones pigmentadas. Por supuesto, es el momento ideal de empezar a usar la toxina botulínica para mitigar pequeñas arrugas de una forma sutil y así lucir un rostro más joven. Por último, en aquellas personas que además de haber perdido luminosidad, también han perdido jugosidad, lo más indicado es el plasma rico en plaquetas o la mesoterapia con ácido hialurónico, según las necesidades concretas de cada caso.
Si no tienes claro cuál es tu situación y deseas conocer que productos son los más adecuados en tu caso o los tratamientos concretos que mejor te irían, acude a tu dermatólogo estético, que es quien mejor sabrá aconsejarte.