Google lleva meses preparando la infraestructura de su propia conexión de fibra óptica y por fin ha comenzado a funcionar. Este miércoles, la compañía del buscador ha comenzado a conectar los primeros hogares de Kansas City a Google Fiber. Este proyecto de Google, que ya comenzó a forjarse hace unos meses, promete velocidades de conexión más de 100 veces mayores que los que ofrecen algunos de los servicios más rápidos de las empresas tradicionales de telecomunicaciones y cable en Estados Unidos.
Google está llevando a cabo el proceso en dos fases. Primero los ingenieros de Google Fiber tirarán la fibra desde la calle hasta las casas de los consumidores, algo que ya han realizado en algunas viviendas del barrio de Hanover Heighs. Después la compañía se pondrá en contacto con los usuarios para llevar a cabo la instalación en los hogares en los que sea demandado este servicio. Los usuarios podrán contactar con Google a través de correo electrónico o teléfono para pedir una cita.
Google Fiber ofrece tres posibilidades a sus clientes. La primera y más barata es la conexión a internet a velocidades normales, 5 megas de descarga y 1 mega de subida. Tan barata que es gratis, aunque tiene un precio de instalación de 300 dólares. Google instala lo que denomina "network box" (caja de red) y automáticamente dispones de conexión y wifi. El siguiente paso es contratar internet a 1 gigabit, que son 70 dólares al mes pero sin coste de instalación. El servicio además incluye 1 terabyte de alojamiento en la nube Google Drive.
Por último, el paquete más completo cuesta 120 dólares al mes e incluye televisión por cable. Además de la caja de red, Google te instala la "storage box", que es capaz de almacenar 2 teras de los vídeos que queramos grabar para ver en otro momento, y la "tv box" para poder ver en la televisión los canales que transmite a través de la fibra óptica. El mando para controlarlo todo es una tableta Nexus 7.