El precio de las conexiones de banda ancha de España mediante ADSL, incluidos los impuestos, se ha mantenido en el último año y se sitúa como el cuarto más caro del conjunto de la UE, según el último informe comparativo de los precios realizado por la Asociación de Internautas. Teniendo en cuenta el poder adquisitivo en cada país, España ocupa el quinto puesto más caro entre los 28 países analizados (la UE-27 y Croacia que acaba de incorporarse), con un esfuerzo de más de medio día de renta para pagar cada mes que se accede a internet.
La organización reclama que se impulse la competencia mediante normas "que protejan la inversión y la existencia de operadores activos" que desplieguen redes alternativas, para evitar la comercialización de productos utilizando como base la infraestructuras de otras compañías.
En cuanto a las ofertas convergentes de los operadores, las que ofrecen varios productos unificados, España está entre los seis países (Francia, Irlanda, Portugal, Hungría y Bulgaria completan el grupo) que ofrecen cuatro o cinco servicios en un mismo paquete. Este proceso se produce en un contexto europeo caracterizado por "el estancamiento en torno a fórmulas de convergencia más clásicas", señala la Asociación de Internautas.
La convergencia de productos "genera importantes ahorros a los usuarios" si se compara con el consumo de los productos de forma individual, indica. Asimismo, destaca que este tipo de ofertas representan "un avance significativo" en la evolución de las tecnologías de la información y la comunicación en los hogares y de adaptación a la demanda de los consumidores y la evolución de la tecnología.
La asociación indica que la elevada contratación de productos convergentes que se ha producido en España desde el cuarto trimestre de 2012 responde a la aparición de las ofertas que puso en el mercado Telefónica, a las que posteriormente se sumaron otras operadoras.