Menú

La Orden de San Juan de Dios, cinco siglos atendiendo a los últimos de los últimos

El hermano Pajares murió dando su vida por los pobres de Liberia. Su orden, fundada en España, atiende a enfermos y discapacitados.

El hermano Pajares murió dando su vida por los pobres de Liberia. Su orden, fundada en España, atiende a enfermos y discapacitados.
Miguel Pajares, en Liberia atendiendo a un enfermo | EFE

El hermano Miguel Pajares ha muerto este martes en Madrid debido al ébola, virus que contrajo en Liberia, un país donde literalmente se ha dejado su vida durante las últimas décadas para ayudar a los pobres y a los últimos de los últimos. Vivió como ellos y finalmente ha muerto como uno de ellos.

Sin embargo, su enfermedad y muerte han puesto de manifiesto en Occidente una obra de la que el hermano Pajares sólo era una gota más en el océano, la pequeña punta de un enorme iceberg, el de miles de misioneros que han dejado todo para ir a todos los rincones del mundo.

Este hermano pertenecía a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, fundada en el siglo XVI en España y que actualmente está extendida por los cinco continentes. Aún hoy sigue los principios que inició su fundador hace cientos de años, el de ayudar a los pobres y necesitados y darles la atención como si del mismo Jesucristo se tratase.

San Juan de Dios inició su gran obra en Granada donde tras una experiencia existencial que le cambió la vida dejó todo y comenzó a servir a los enfermos mentales, despreciados en aquel tiempo, a los mendigos y a los numerosos enfermos de la ciudad. Pronto su obra fue creciendo y junto a sus discípulos se convirtió en la orden hospitalaria que es hoy en día.

Los más de 1.200 hermanos que tiene la orden y de la que era partícipe Miguel Pajares siguen aún hoy la estela de su fundador. Repartidos por todo el mundo tienen hospitales, centros de salud, albergues para vagabundos, centros para la atención de enfermos mentales y ancianos y un sinfín de obras más de la que se benefician cientos de miles de personas de los cinco continentes sin importar clase social, raza o religión. Solamente servir al otro como si de Cristo se tratase.

Pajares pertenecía en estos momentos a la Provincia de África de su orden. Allí, cientos de hermanos trabajan en unas duras condiciones para atender a una población que todavía vive en la pobreza. Por ello, ha sido importante su expansión por el continente por el que tienen repartidos hospitales generales, centros de atención primaria y de salud mental así como para discapacitados físicos y ancianos.

De este modo, su presencia en África llega a Benín, Ghana, Malawi, Sierra Leona, Camerún, Kenia, Mozambique, Togo, Islas Mauricio, Liberia, Senegal y Zambia. Y ni la expansión del ébola por el continente les desanima, es más, les exhorta a seguir con su labor. En Monrovia, donde se contagió el hermano Pajares y donde han muerto ya varios de sus compañeros no queda actualmente ningún hospital abierto por lo que la Orden de San Juan de Dios ya ha preparado un equipo para enviar a Liberia y reabrir el hospital. El virus no puede ganar, aseguran los hermanos.

Pero su actividad caritativa y asistencial no se queda únicamente en lo que se conoce como tercer mundo. En los países de Europa o en EEUU también desarrollan una importante labor que además ahorra una gran cantidad de dinero al Estado atendiendo a miles de enfermos o discapacitados.

De hecho, tan sólo en España llevan quince hospitales generales y especializados como el infantil de San Rafael de Madrid. Además, poseen decenas de centro de salud, residencia de ancianos, centros psiquiátricos, centros de acogida, comedores sociales, albergues así como centros de formación profesional y de educación especial.

El "loco del amor" como era conocido San Juan de Dios por su especial atención por los discapacitados mentales siempre repetía que había que convertir los hospitales en "lugares de acogida" y así lo transmitió a sus discípulos. Y cómo el santo repetía en todo momento, "haced bien por amor de Dios, hermanos míos", así el hermano Pajares vivió y murió, haciendo el bien y ayudando a los últimos y olvidados hasta dar la vida por ellos.

Temas

En Tecnociencia

    0
    comentarios