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Microsoft pretende sustituir al portátil con la tableta Surface Pro 3

Surface Pro 3 nace con el ambicioso reto de fusionar las tabletas con los ordenadores portátiles y acabar sustituyendo a estos últimos.

Surface Pro 3 nace con el ambicioso reto de fusionar las tabletas con los ordenadores portátiles y acabar sustituyendo a estos últimos.

"Estoy seguro de que esta es la tableta que puede sustituir al portátil", afirmó durante la presentación de la nueva tableta Panos Panay, vicepresidente de Microsoft para Surface. Pany recalcó que la inmensa mayoría de los usuarios de tabletas tienen también un portátil, ya que acaban empleando cada dispositivo para tareas diferentes. El objetivo de Microsoft es "poner todo en un mismo paquete" y "sin ningún tipo de compromiso" en cuanto a capacidades, añadió.

El nuevo producto, que supone una ambiciosa apuesta después de los fracasos comerciales de los anteriores modelos de Surface, incorpora una pantalla de 12 pulgadas y un procesador Intel, que puede llegar a ser el i7 en la versión más potente. La nueva tableta saldrá al mercado este miércoles en Estados Unidos a un precio de 799 dólares (582 euros) en su configuración básica, aunque todavía no hay calendario o precios para los mercados exteriores.

Esta es la tercera generación de Surface en poco más de año y medio –la segunda generación fue presentada en septiembre del año pasado–, pero Microsoft ha acelerado su lanzamiento ante el enorme éxito de los modelos de Apple y de las tabletas que operan con sistema Android, un éxito que amenaza a la joya de la corona de la empresa, el sistema operativo Windows.

Una pantalla más grande

La Surface Pro 3 incorpora varias novedades y mejoras técnicas entre las que destaca la pantalla de 12 pulgadas, frente a las 10,6 de la anterior generación, que cuenta con una resolución de 2160 por 1440 píxeles. Microsoft ha puesto especial empeño en que sea un dispositivo que resulte ligero y fino pese al tamaño de su pantalla. De esta forma, tiene un grosor de tan sólo 9,1 milímetros y un peso de 800 gramos, elevado si lo comparamos con otras tabletas, generalmente con una pantalla más pequeña, pero ligero si lo hacemos con portátiles con una potencia similar. Y es que la tableta incorporará un Intel Core i3, i5 e i7, según el modelo, con un rendimiento de batería un 20 por ciento superior al anterior Surface.

Además del procesador, la tableta estará disponible con distintas opciones de almacenamiento, que van de 64 a 512 GB y de memoria, que puede ser de 4 u 8 GB. Incluye un puerto USB 3.0, un puerto Mini DisplayPort para conectarlo a la televisión y un lector de tarjetas microSD.

La nueva Surface sigue estando fabricada en metal y cuente con un soporte integrado para sostenerlo en pie que, en esta ocasión, puede adoptar varias posiciones, con lo que puede pasar de vertical a casi horizontal. En cuanto a sonido, cuenta con tecnología Dolby. Microsoft también ha rediseñado la Type Cover, su funda con teclado incorporado, para que sea más cómoda de utilizar y el bolígrafo de la tableta, que ahora incorpora un botón que permite abrir de forma rápida aplicaciones como OneNote.

También se le puede conectar un ratón, con lo que permite a sus propietarios usarlo de la misma forma que un ordenador tradicional, un detalle que permite. "Queremos productos y tecnología que den al individuo más posibilidades en su trabajo y en su vida" y así pueda "sacar más de cada momento", afirmó el consejero delegado de Microsoft, Satya Nadella, al abrir la presentación.

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