Desde hace años muchos coches salen de las fábricas con los sensores de aparcamiento que ayudan al conductor a no rozar su parachoques con otros vehículos o paredes. Para los que tienen un coche antiguo o no estaba incluido este extra en su vehículo nuevo, FenSens ha creado un dispositivo que se instala de forma sencilla y rápida.
Es un portamatrículas que cuenta con sensores de proximidad integrados que se conectan al teléfono móvil. Gracias a la aplicación se puede ver en la pantalla del smartphone el gráfico que nos muestra la cercanía al obstáculo, hasta una distancia máxima de tres metros. Para alertarnos emitirá un sonido que será más constante a medida que nos vayamos acercando. También avisa por vibración por si no tenemos el móvil a mano o está en el bolsillo. La autonomía del soporte es de unos cinco meses y se recarga mediante un cable USB.
Los sensores utilizan los ultrasonidos para calcular la distancia a la que se encuentran los objetos y la instalación consiste en quitar la matrícula trasera, montarla sobre el soporte y volver a atornillarla.
El precio varía en función del modelo sencillo con dos sensores a 120 dólares o el modelo más preciso con cuatro sensores a 150 dólares, aunque puedes acceder desde su web a una oferta de preventa a 99 dólares.