Teniendo en cuenta que la última pista de Sly Cooper se perdió hace ocho años, no es de extrañar que el anuncio de Ladrones en el Tiempo se contemplara en su día con una mezcla de entusiasmo y escepticismo. Y las razones para tanta sensación son muchas.
En primer lugar, por el tiempo transcurrido entre el último juego y esta nueva producción, creada para una plataforma desconocida por el personaje; el tipo de circunstancias que en el raro caso de no enterrar definidamente una franquicia, sin duda crean una enorme expectación. En segundo lugar, las características en la que se forjan las aventuras del mapache están anticuadas, y su género lleva mucho tiempo en la sala de cuidados intensivos. Pero estos matices no se pueden asumir en sentido peyorativo, después de todo, estamos ante una serie verdaderamente icónica con un personaje principal sólido, forjado en un período en el cual los juegos de plataformas en 3D también podían innovar y presentar elementos frescos. Pero ese tiempo pasó. De hecho, hoy en día sería muy difícil imaginar a alguien sorprendido y emocionado por algunos polígonos desfilando en un entorno virtual multicolor repleto de elementos flotantes.
Por suerte no todo está perdido. Sanzaru Games ha recogido el testigo de Sucker Punch para plantearnos una cuestión: ¿Que nos impide volver a emocionarnos y disfrutar con el ambiente y las divertidas andanzas de Sly Cooper y su tropa? De hecho, en lugar de perderse en peligrosas reinvenciones que podrían hundir el hermoso legado de sus entregas en PlayStation 2, el nuevo equipo de desarrolladores ha optado por conservar el cuerpo y espíritu de la serie para llevarlo hasta una nueva generación de jugadores, mientras hace las delicias de aquellos que tienen un hueco en su memoria para, por ejemplo, Honor entre ladrones... Aunque ahora el asunto es más complicado.
El viejo Sly rejuvenece
Sly Cooper: Ladrones en el Tiempo supone el retorno del astuto mapache descendiente de una familia de maestros ladrones, que se embarca en una nueva aventura en compañía de sus amigos Murray y Bentley. La historia comienza cuando las páginas del Latronius Mapáchibus, el valioso libro de trucos para robos de la familia Cooper, desaparecen misteriosamente. Sly y su clan deberán viajar atrás en el tiempo para salvar a sus antepasados y recuperar los secretos de la familia Cooper.
Cualquiera que haya seguido la carrera del mapache en anteriores ocasiones se sentirá como en casa. Todo lo que nos rodea es muy familiar devolviéndonos a un universo de entornos tridimensionales, que ya no son una novedad para nadie. No obstante mas allá de la tremenda sensación de familiaridad que provoca el retorno de personajes y saltos entre plataformas, se han añadido una dosis masiva de elementos nuevos. Vamos a los detalles. Durante la aventura, el jugador podrá escoger entre varios personajes, cada uno con su característico sentido del humor. Pero en Sanzaru Games han sabido entender y aprovechar estos elementos clásicos para crear un admirable y valiente punto de continuación. Aquí, los viajes en el tiempo, como bien indica su denominación, son la clave de la aventura, desde unos momentos iniciales a modo de tutorial en el París actual, hasta el Japón feudal de los samuráis, pasando por la era glacial o el lejano oeste, la producción no se olvida de aquella jugabilidad que tanto hizo disfrutar a los fans de la saga, además de añadir nuevas y épicas formas de acabar con los jefes finales, movimientos de sigilo y combate totalmente renovados, puzles, disfraces coleccionables, habilidades especiales y como no, el sentido del humor que caracteriza la serie.
Sin perder el hilo de la historia, en cada escenario nos encontraremos con un antepasado de Sly Cooper, que además de aportar dinamismo al guion tiene consecuencias en la jugabilidad, ya que cada antepasado dispone de un conjunto de habilidades únicas, ideales para solucionar situaciones específicas. No obstante, la incorporación de nuevos personajes añade variedad y frescura a la trama, que además es bastante sencilla de seguir, ideal también, para los más peques de la casa. Que el argumento tenga un carácter sencillo y directo no es necesariamente un fallo de planteamiento, ya que además de cumplir con las misiones principales para llevar la trama a su apoteosis final, también se puede invertir tiempo explorando en los diversos periodos históricos del juego, buscando caminos alternativos o recogiendo tesoros. De modo que una trama ligera permite al jugador explorar y divertirse sin perderse en el ritmo que marcan los guionistas para una mejor inmersión en la historia.
Muchas opciones de juego
Además de las amplias posibilidades de juego que ofrece el último Sly Cooper, hay que sumar el empeño de la desarrolladora en brindar mecánicas variadas y divertidas, como las secuencias de hackeo de Bentley, las de disparos protagonizadas por Carmelita, áreas de juego beat ‘em up para Murray, o escenas de baile en la cuales ambos personajes ofrecen sus mejores movimientos para distraer a los guardias en un conjunto tan conexionado con el entorno que logra en parte, expandir la tradicional receta de aquellos que construyeron los juegos de plataformas en 3D.
A nivel técnico, Sly Cooper: Ladrones en el Tiempo logra sus objetivos merced a un diseño artístico, de escenarios y personajes muy bien trabajado. El aspecto cartoon logrado gracias a la utilización de la conocida técnica cel-shading lo aproxima mucho a nivel estético a una producción en dibujos animados, perfecta para animar a los pequeños, al igual que la localización y el doblaje para nuestro país, muy en la exigente línea de las producciones de Sony.
Conclusiones
Sly Cooper y su banda han logrado escapar de su propia máquina del tiempo con una aventura valiente, inteligente y audaz con varias trampas reservadas para aquellos que desvirtúan de primera las franquicias clásicas de consola. Aunque lógicamente lo tenían a su disposición, en Sanzaru Games han evitado viajar al futuro buscando una peligrosa reinvención, algo que finalmente se ha demostrado innecesario, trabajando el juego como si se tratase de una continuación legítima de los juegos de PlayStation 2 en la mejor en la etapa de Sly. Pero también hay personajes inéditos, y frescas mecánicas de juego que permiten respirar de nuevo a un género de juego tan olvidado como necesario.