Y otra cagada de la evolución es el PROGRIS CORRUPTUS un ser repulsivo que habita en el territorio español por el que se mueve como pez en el agua y que se dedica a robarte el dinero para gastarselo en gilipolleces y en dejar en bancarrota las zonas por donde pasa.
Bueno otro ejemplo son esos presidentes del gobierno que como única descendencia, tienen a hembras góticas.
Yo lo que veo en esos seres son futuros candidatos al premio Darwin.
Las vacas no ven en colores y también se emborrachan si comen manzanas y les fermentan en la panza antes de rumiar. Eso he oído.
Y esto no lo he oído sino que lo sé, puesto que era vecino mío: daltónico y aficionado a todos los zumos fermentados, tanto de manzanas como de uvas. No sería justo decir de él que era un aborto de la naturaleza; tampoco de las vacas, las ballenas y los arces.
Por lo que se deduce del artículo, una cosa está clarísima: el personaje que ha escrito el libro no tiene ni la más pajolera idea sobre biología evolucionista. Es más, sospecho que el autor del artículo tampoco la tiene. Hacía tiempo que no leía un cúmulo semejante de estupideces sobre el asunto.
Madre mia que titular... periodista?
Al autor de la noticia:
Los pronombres interrogativos-¿Qué? o ¿Por qué?-llevan tilde...A ver si nos enteramos.Por Dios;que se supone que tiene ud. unos estudios.
¡Señor,qué daño ha hecho la LOGSE!
Las ballenas no son daltónicas. Los daltónicos somos nosotros. Ya lo dijo Bécquer
A los escarabajos les compensa cargar con su coraza por encima del riesgo de quedar panza arriba en una superficie lisa.
Los alces pueden volver al año siguiente a comer sus manzanas fermentadas, eso quiere decir que no pierden la vida por hacerlo.
Al guepardo también le compensará perder algunas presas a cambio de ser capaz de cazar.
El hombre ha evolucionado para vivir en grupo, se ha 'elegido' la protección del clan a costa de aumentar las posibilidades de muerte del nacido sin asistencia y de su madre.
Puede ser un buen libro de curiosidades, pero ahí se queda.
Partiendo del hecho de que no es la supervivencia del más fuerte, sino del más apto para sobrevivir en su entorno, a mi juicio creo que el titulo es engañoso y algo sensacionalista, ya que lo que falla no es el proceso se supervivencia en si, sino la interpretación que hacemos del mismo. Lo que este señor crea que es antinatura puede serlo de verdad o no, dependiendo de como era la vida cuando se adaptaron a esa forma de supervivencia y no ahora que hemos modificado todos los hábitats tan rápido y drásticamente, que no les hemos dado tiempo de adaptarse y buscamos un sentido a como son en su nuevo entorno y no en el entorno original.
Pero como no soy científico me explicaré poniendo un ejemplo de asociación de la competencia por sobrevivir en la naturaleza y en el libre mercado, así como lo dañino del intervencionismo progre en la sociedad del no-bienestar. Si en vez de dejar a la naturaleza buscar su propia armonía, dando libertad a buscarse la vida al más apto para que se lo curren y el vivir sea un premio, (ya sea en la naturaleza o libre mercado), se subvencionan continuamente a los alces viejos y a los heridos para que no se los coma ningún león y encima se lastra con impuestos a los leones para que dejen pastar en paz a los alces y si por persistencia aun así cazan algo, se lo quitan los políticos dueños del parque natural Y HACEN UNA BARBACOA mientras les venden al mundo que es por el bien de los alces, obviando el bien general y las consecuencias a largo plazo. Cuando ya los alces se multipliquen tanto que falte pasto para todos y los leones que no se volvieran vegetarianos se extinguieran no se puede culpar a la tierra de producir poca hierba, y debatir si es por falta de agua o por mala suerte. El problema no es si ya si son daltónicos o no como dice el artículo, el problema es porque lo fueron en su día cuando se la jugaban por existir y todo tenia sentido.
Perdón a los biólogos por la demagogia, pero solo pienso en alto para aclarar mis propias ideas, un saludo.