'Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, parte I': Muérete ya, Voldemort
Las aventuras del joven mago llegan a su séptima y última entrega en una aventura dividida en dos partes, la segunda de las cuales se estrenará en verano de 2011. En esta parte I Harry Potter y sus amigos se ven condenados al destierro una vez que Voldemort ha tomado el control del ministerio de Magia. La única posibilidad de evitar una guerra entre magos y muggles y de sobrevivir a su acoso es encontrar los horrocruxes donde el malvado ha depositado su inmortalidad.
No sé ustedes, pero un servidor piensa que la saga Harry Potter no levanta cabeza desde hace ya varias películas. De hecho, salvo las irregulares dos primeras entregas dirigidas por Chris Columbus, y la excelente tercera película cocinada por Alfonso Cuarón (que supo aportar estructura y tensión al libro de J.K. Rowling), las demás naufragaban estrepitosamente a la hora de presentar una aventura juvenil con la adecuada carga de suspense.
En Harry Potter y Las Reliquias de la Muerte: Parte I, volvemos a sumergirnos en una odisea nocturna sin foco ni evolución dramática en la que, de nuevo, todo un universo de actores secundarios pulula por la historia sin tener un destino o una ubicación concreta en ella. Un relato que, como los dos o tres anteriores, dilata su cada vez más débil hilo argumental sin acertar a dar con la fuente de la tensión, y en el que resulta mucho más interesante lo que no vemos que las aventuras que sigue su trío protagonista, presentadas por el director David Yates sin lograr que los lazos entre los personajes traspasen la pantalla.
El resultado es una obra que se quiere concentrada en la desdicha íntima de su protagonista, pero que se topa una y otra vez con un Daniel Radcliffe incapaz de conseguir nuestra empatía hacia el héroe que le ha tocado componer. Como es habitual, la intriga avanza a trompicones y la película se ahorra cualquier tipo de satisfacción en forma de desenlace, encasquetándonos un enorme ‘continuará’ en su momento presuntamente climático.
Lo mejor es, de nuevo, el desbordante diseño de producción y el aliento siniestro y hasta obsesivo que Yates trata de otorgar a un guión que comienza con un sacrificio y que apenas se permite un momento de asueto o humor (y que cuando lo hace da vergüenza ajena: véase la escena del baile). Poco importa su puesta en escena. La película fracasa a la hora de sintetizar el mazacote literario y queda la sensación de que Harry Potter es una saga que nunca ha podido despegar –resultados comerciales aparte- debido a lo que ha pasado en las cocinas del estudio: quizá sea la obligación de seguir a pies juntillas los textos de J.K. Rowling lo que ha impedido elaborar películas con un argumento exacto.
Harry Potter y las Reliquias de la Muerte: parte I se estrena el 19 de noviembre.
http://elblogdekufisto.blogspot.com/2010/11/corderos-tu-ya-sabes-lo-que-me-gusta.html
Hola, Juan Manuel: La verdad es que las películas de Harry Potter no son excelente productos cinematográficos, sino máquinas de generar ganancias para la Warner, como bien apuntas. Cumplen medianamente con el objetivo de entretener y son fácilmente olvidables, salvo para los muy fanáticos de la saga. Confieso que yo las he visto todas y que no me resultan desagradables, aunque algunas podrían haberse realizado mucho mejor. Coincido con lo que dices de que la tercera es de las más logradas, aunque en su momento me gustaron bastante también las dos de Columbus. Y tienes razón también en que ese desmedido afán de seguir al pie de la letra los textos de la autora les ha restado posibilidades en la adaptación al cine. Creo que la Rowling ha sido muy exigente en ese punto de ser fieles a sus textos, aunque luego en las películas han deslizado algunos detalles sobre los personajes -supuestamente sugeridos por ella- que no aparecían para nada en los libros. Aunque no sea una gran película -no aspira a ello, me figuro-, iré a verla de todos modos y ya te comentaré (permite el tuteo, aunque no nos conozcamos). Me gustaría que sepas que te he leído otras entradas del blog pero hasta ahora no me he atrevido a escribir ningún comentario, y eso que me apasiona el cine. Tus crónicas y críticas son muy entretenidas, muy personales. Intentaré volver a escribir otro día. Disculpa el rollo y saludos, con afecto.
Muy buenas, Alma. Le agradezco con total sinceridad sus halagos, de verdad. Muchas gracias! Respecto a mi diatriba contra Harry Potter, coincido con usted. El argumento y la fantasía de la serie me podía haber enganchado mucho más, ya que no me ha gustado nada como han definido el argumento, que no sólo daba para más, sino que ha sido desarrollado de la forma más fría y poco interesante posible.. . Las de Columbus tienen el encanto de que eran las primeras y por tanto tienen el factor sorpresa, de que eran niños pequeñitos en ellas... Y creo que la tercera es la única que se atrevió a convertir realmente el libro en una película. El desastre vino después, con esa renuncia a desarrollar como dios manda el enfrentamiento con el villano y el plegarse totalmente a la fórmula... Lo que está bien en un libro no tiene por qué funcionar en una película, pero los fans lo que querían era precisamente eso: un libro filmado, no bien adaptado con respeto. Ah! Y escribe cuando quieras, que ya sabes que contesto...
Juanma (si me permites la confianza), ante todo, tutéame, por favor, ya que yo lo hice en el mensaje anterior y lo haré ahora, aunque no nos conozcamos, pero eso no importa. Tienes razón en tu respuesta y, en su mayor parte, tu 'diatriba', como la llamas, es acertada. Las películas de HP se quedan en un quiero y no puedo, salvo la tercera y con ciertos reparos. Pero es que de donde no hay no se puede sacar. La insistencia de la Rowling en seguir el argumento de los libros punto por punto y coma por coma les ha quitado a las pelis toda la emoción que podrían haber suscitado en el cine. Tal vez por eso no te hayan enganchado, y porque, como bien dices, las han realizado de una forma fría, neutra y falta de tensión cinematográfica. A mí me pasó con las dos últimas, que me divirtieron pero no me emocionaron para nada. Insisto, y me disculparás, en que a mí me han entretenido, pero las he olvidado a la hora de salir del cine. Sólo les entusiasman a los muy fanáticos de la saga. Por otra parte, no sabes cómo te agradezco que nos contestes y que interactúes con nosotros. No es lo usual entre las firmas de la blogosfera. Incluso aquí en LD, grupo de comunicación al que quiero y admiro por vuestra valentía, independencia y personalidad, creo que son pocos los autores de blog que responden a los lectores: a veces Pío Moa lo hace; a veces tu tocayo Juanma Rodríguez (el penúltimo raulista vivo, ya sabes) y, muy de cuando en cuando y en antena, nuestro querido Federico. Y ya termino (pesao soy, eh): los elogios son absolutamente merecidos. No haces una crítica aburrida ni ñoña ni complaciente. Al contrario, da gusto leerte porque lo que escribes se hace ameno, interesante e inteligente. No exagero, es lo que pienso. Mañana por la noche iré a ver la peli de HP con mi mujer. Ya te contaré. Procuraré visitarte a menudo, por lo dicho y por lo amable que eres. Hasta pronto y saludos, con todo mi afecto
Muchas gracias de nuevo, Alma, y considérate tuteado. De todas formas, debo decir que tengo todas las películas de la serie en mi casa, y que tengo intención de repasar alguna de ellas con toda la intención de disfrutar, a ver si me equivoco o no. A ver si cuando veas la película nos cuentas tu opinión, sobre todo sobre si es verdad que han seguido la novela de pe a pa (novela que no he leído, lo confieso) y si eso era realmente necesario...