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'Hotel Transilvania'

Fiel a mi estilo de empezar esto con algo que no tiene nada que ver con nada, durante el visionado de Hotel Transilvania, la nueva comedia de Sony Animation, me vino a la cabeza aquella comedia de Neil Jordan, El hotel de los fantasmas, protagonizada por ¡Steve Guttenberg y Peter O’Toole! y de la que si no se acuerda nadie por algo será. Con esto quiero decir, si es que quiero decir algo, que el género de la comedia gótica tampoco es exactamente nuevo, como tampoco lo es el slapstick y el aliento cartoon que aporta al invento el director ruso Genndy Tartakovksy (Las Supernenas). Pero en esto del cine uno más uno casi nunca son dos ¿verdad?.

Hace tres años, Sony Animation irrumpió con notable fortuna comercial y artística en el género de la animación. La película era Lluvia de albóndigas y estaba basada en un popular cuento infantil norteamericano, aunque la cinta de Phil Lord y Chris Miller (firmantes este año de la estupenda Infiltrados en clase -sí, no me sean incrédulos, he dicho estupenda...) parecía beber sin límites tanto de aquella fuente como del cartoon más alocado y absurdo de Chuck Jones.

Entre aquella y la que nos ocupa, el estudio ha tratado de alcanzar a Dreamworks Animation o Blue Sky, algunos de sus competidoras naturales, mediante su acuerdo con Aardman Animation, una alianza que dado lugar a esa gozada titulada Arthur Christmas y la simpática Piratas, ambas morrocotudos e inmerecidos fracasos de taquilla. Desconozco la suerte que correrá su asociación con la factoría británica, pero los resultados de Hotel Transilvania están mucho más claros. La cinta doblada en español por Santiago Segura, Alaska y Mario Vaquerizo lleva ya amasados 120 millones en la taquilla doméstica (es decir, la americana), devorando con patatas a un título fuerte como es Frankenweenie, y todo ello a falta de estrenarse en muchos mercados internacionales, lo que garantiza una secuela y el desembarco -quien sabe si definitivo- de su director, el ruso Genndy Tartakovsky, en el cine de animación norteamericano.

Tartakovsky, el creador de las famosas Supernenas y El laboratorio de Dexter, y uno de los renovadores de la animación televisiva infantil, prolonga ese aliento cartoon que mencionábamos al principio y aporta al show un sello personal no sólo visual, sino también narrativo, que marca ciertas distancias con una muestra del género al uso. Si esto ocurre no es por su dramaturgia, apoyada como era de esperar en una trama familiar basada en el esperable tira y afloja paternofilial, y destinada a establecer el nexo emocional con el espectador. Tampoco lo hace por su marco deliciosamente terrorífico, una parodia/homenaje a los clásicos del terror gótico más universales y a monstruos como Dracula, Frankenstein o el Hombre Lobo (por mucho que este hable con acento gitano en el afortunado doblaje español), que le da a la película una apariencia exuberante y cierta malicia a la hora de pergeñar sus gags.

El artista ruso adorna la función con un sentido del humor rayano en el exceso que busca el encontronazo con el espectador más despistado. Hotel Transilvania carece de sutileza, es como un elefante en una cacharrería, y en ocasiones tiene tanta prisa se olvida de hacernos empatizar con sus gritones personajes, olvidándose de su premisa inicial una vez comienza el enredo, sin duda una herencia de la transgresora histeria del formato televisivo del que proviene su autor. Pero una vez el incrédulo se recompone, la película nos obliga a seguirle el rollo a través de una fuerza narrativa imparable y bastante talento para delimitar sus objetivos, que no son otros que una fábula sobre el amor familiar y una exploración sobre la individualidad, lo diferente, sobre lo humano y lo monstruoso... y, quizás, el final de las fronteras entre uno y otro. Hotel Transilvania logra congraciar todo eso sin que nada pierda identidad, y acaba resultando tan deliciosa e insólita como agradable y convencional. Supongo que es lo que transmite un dibujo animado orgulloso de serlo.

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comentarios
1 mrsambo, día

BATTLE ROYALE (2000) Kinji Fukasaku. El precedente de LOS JUEGOS DEL HAMBRE, en violento y salvaje. http://cinemelodic.blogspot.com.es/2012/09/critica-battle-royale-2000.html