José Cadalso y Vázquez de Andrade vino al mundo en Cádiz el 8 de octubre de 1741 y murió en la misma ciudad antes de cumplir los cuarenta y un años, a principios de 1782. Contra lo que podría sugerir el hecho de iniciar y terminar la vida en idéntico lugar, su vida fue de las más cosmopolitas y aventureras que haya tenido jamás un escritor español. Su madre murió en el parto, cuando el padre estaba en América, y el niño fue criado por un tío, el jesuita Mateo Vázquez, que lo envió a Francia. El progenitor no se presentó sino trece años más tarde, aunque siempre se ocupó del bienestar material de su hijo y, al regreso, viajó con él a Inglaterra, Alemania, Italia y Holanda. Por fin, volvió a España, hablando las principales lenguas europeas, además del latín. La impresión que le produjo su patria, sometida a la comparación con otras naciones, fue muy negativa. Tenía dieciséis años cuando ingresó en el Seminario de Nobles de Madrid, «con todo el desenfreno de un francés y toda la aspereza de un inglés», según sus propias palabras. Hizo todo lo posible para volver a moverse por Europa y lo logró: recibió la noticia de la muerte de su padre en Copenhague, en 1761. Al parecer, fue muy apresurado o muy torpe a la hora de tramitar su herencia; el caso es que en poco tiempo se vio en la ruina y obligado a alistarse en el Regimiento de Caballería de Borbón en 1762, participando en la campaña de Portugal. En 1776, durante el motín de Esquilache, mientras tenía ocasión de «conocer el verdadero carácter del pueblo», salvó la vida del conde de O’Reilly, lo que le permitió acercarse a la corte. Por atribuírsele un libelo libertino titulado Calendario manual y guía de forasteros en Chipre (1768), del que realmente era autor, fue desterrado a Zaragoza. Sus muchos y conocidos amoríos tuvieron su punto culminante al retornar del destierro y conocer en Madrid a la actriz María Ignacia Ibáñez, que moriría de tifus a los veinticinco años. Cuenta la leyenda que Cadalso intentó desenterrarla y, en cualquier caso, cayó en una honda depresión, de la que se consolaba en la tertulia de la Fonda de San Sebastián, de la que eran asiduos sus amigos Nicolás Fernández de Moratín y Tomás de Iriarte. De todo esto se da testimonio en su Memoria de los acontecimientos más particulares de mi vida. Participó en el sitio de Gibraltar y murió por el golpe recibido en la sien de un casco de metralla, un mes después de haber sido ascendido a coronel.

Otras efemérides de este día que deberías conocer

1573: Se levanta el asedio de Alkmaar por parte de las tropas españolas de Fadrique. Primera vez que una ciudad de la Provincias Unidas resiste un asedio español.

1676: Nace el padre Feijoo, autor del Teatro crítico universal.

1814: Apertura del Congreso de Viena, que pretendía reconstruir las fronteras de Europa, trastocadas por las conquistas de Napoleón.

1917: León Trotski es elegido presidente del Soviet de San Petersburgo.

1992: Los Reyes de España inauguran en Madrid el Museo Thyssen.