Al igual que el pintor costumbrista deja huella del momento ordinario, sin juzgarlo, sin excederlo en importancia, Jenn Díaz (Barcelona, 1988) eleva la simpleza del instante y traza la cotidianidad del momento como trama en Madre e hija (Destino), su última novela en la que retrata el universo femenino. El libro comienza con la muerte de Ángel, la figura paterna, el pilar que sostiene el convencionalismo de una familia. Es padre, marido y hermano. Su ausencia provoca la desorientación del camino trazado.
La escritora catalana nos cuela en la vida de cuatro mujeres a través de un narrador, que se sitúa en la escena con la cercanía y el lenguaje de un miembro más de esa familia, pero inerte y sin ningún tipo de interacción. Gloria, Dolores, Natalia y Ángela representan a distintas generaciones y dan vida a un modelo distinto de mujer. Cada una se posiciona en un punto equidistante a la hora de afrontar la vida, dar afecto o comportarse de cara a la galería. Además, son el cajón de sentimientos como la inseguridad, la resignación o la soledad, una "soledad amarga y desesperante".
Jenn Díaz utiliza un lenguaje simple, con un tono cercano, entrañable, rozando un lenguaje infantil y tierno -"No sabía que había hecho mal y le pedía perdón, perdón, perdón y perdón, no era su intención lastimarla, era un estúpido, muy estúpido, el hombre más estúpido del mundo" (p.65)-, y muy introspectivo, buscando en lo más íntimo del alma humana, con un pesimismo no victimista que recuerda a Ana María Matute. "Se había dejado consolar por aquella desconocida, que parecía acostumbrada a aquel tipo de situaciones porque lo hacía muy tranquila, como si nada, porque muchas mujeres viven de eso, de hablar de las desgracias, y tienen un puñado de frases para decir" (P.91).
Es una historia donde las habladurías, las mezquindades encubiertas, el qué dirán, la vergüenza y el estricto cumplimiento de lo pactado son la guía invisible que empuja al argumento. Solo queda conformarse porque "la vida viene como viene" (p.102). No busquen diálogos en exceso ni acción.
Madre e hija es la cuarta novela de Jenn Díaz tras Belfondo, El duelo y la fiesta y Mujer sin hijos. Con sólo 28 años se ha ganado la simpatía de los lectores con su escritura poética, sin traspasar a lo lírico. Con esta novela, regresa al tema familiar como punto de partida. Las pasiones domésticas son su principal fuente de inspiración, con especial atención al papel de la mujer, como ya hiciese Carmen Martín Gaite.
Jenn Díaz. Madre e hija. Editorial Destino. 2016. ISBN: 9788423350643. 192 páginas. 17,50 euros.