La Biblioteca Castro ha publicado los tres primeros tomos de las Obras completas de Ramón del Valle-Inclán, en una edición a cargo del Grupo de Investigación Valle-Inclán de la Universidad de Santiago de Composteladirigido por Margarita Santos Zas.
Están dedicados a la narrativa de ficción y ensayo en orden cronológico de publicación, de modo que comienza con la narrativa breve de Femeninas y Epitalamio y continúa el segundo volumen con las Sonatas y la Trilogía de la Guerra Carlista. Como broche, el ciclo de El Ruedo Ibérico que ocupa, casi íntegramente, el tercero de los tomos.
Esta colección descubre al autor como un hombre inconformista, lúcido e independiente más allá de los tópicos y permite entender su modernismo como una declaración de sus principios estéticos y una forma de protesta frente a la realidad histórica que le tocó vivir.
A pesar de que se publicaron hace unos años en la editorial Espasa, Andrés Amorós indicó la dificultad de reunir sus obras completas por "la complejidad de fijar el texto de Vallé Inclán". Por ejemplo, La niña chole, que nace como un cuento independiente, pasó a formar parte posteriormente de Sonata de Estío y luego a Historias perversas. Así, hasta siete versiones. A esto se suma la circunstancia de que Valle Inclán repartió los derechos de autor entre toda la familia y, ante las diferencias de estos, fue difícil de unificar.
Sobre su vida se cuentan anécdotas brillantes y divertidas "que oscurecieron a ese personaje que el mismo se inventó", apuntó Amorós en Es la mañana de Federico. "He conocido a dos personas que fueron amigos de Valle Inclán", recordó. "Uno, Luis Calvo, que fuera director de ABC, y otro, Domingo García Sabell, el médico que lo atendió durante su última enfermedad. Ambos decían que era educado, razonable y agradable, que esa visión esperpéntica que tenemos de su persona se la inventó el mismo".
Pero no hay que quedarse en la anécdota, sino llegar a la obra, recomienda Amorós. Por un lado, el modernismo (La sonata de otoño), que es una depuración de la belleza; y la segunda, el esperpento (Luces de bohemia).
Además, Amorós recomendó acercarse a este personaje clave de la literatura española del siglo XX a través de la biografía de Ramón Gómez de la Serna, publicada en Austral, "uno de los libros más divertidos que hay".