Primero... (que veo que no ha salido):
Tiene una gracia especial, carente de la mas mínima traza de humor, la contemplación serena y desapasionada del típico contubernio abertzale, marca euskal label del ganado txiko del país de los platillos roscantes...
Suelen ser reuniones paritarias en cuanto al género de los participantes, no siendo muy clara la diferenciación entre los sexos, pues tanto la indumentaria, como los tocados capilares han sido diseñados para que no existan características morfológicas externas que diferencien a los individuos por su género.
En cuanto a la pureza de la raza, coexisten los vascos con profundas raices étnicas (con apellidos tan caracteristicos como los Arraskamelabarrigabeitia, Lepikaelpitilingorri o Tontikodelhabasolo de toda la vida) descendientes directos de los antiguos juntavacas del Amboto, o de los sorvechipirones del cabo Matxitxako. Junto a estos, indistinguibles fenotípicamente, están los reketevascos de nuevo cuño de apellidos tan euskaldunes como Loudeiro, Alonso, Pérez, Cantalejo o Jimenez.
¡Pues que no pase por allí!. ¡Qué mania con mantener a esta "nación" y a la "otra" en España!- Pero si no nos traen nada mas que dolor y lágrimas... y ruina económica.....agur Euskadi... adeu Catalunya. ¿Por qué seguir financiando, arropando, apoyando, integrando dentro de una antigua y gran nación, con un idíoma universal, a estos territorios, dominados por tribus nacionalistas, propias de otras épocas, que no nos quieren ni ver?. Que se vayan, y si hay entre ellos quienes no desean someterse a esa dictadura, que se vengan a la casa común, donde los recibimos con los brazos y el corazón de par en par.
Sigo...
Estos últimos, en un alarde de euskaldunidad, suelen ir con una acumulación de símbolos externos poco menos que recargada. A saber: no puede faltar el Lauburu (o cruz esvástica de brazos curvilineos, tan habitual en tantos y tantos pueblos indoeuropeos y celtas, como politizada por estos pastos), la camiseta de las Eusko Selekzioak en sus diferentes versiones, las bionas de métrica cincuenta y cinco o superior y rosca fina, las makilas o espanta viejas, las camisetas de Presoak Etxera, las botas de treking con solera, los txandales de los domingos, los aritos de oro en los lóbulos (si es con el lauburu, mejor), los pañuelos palestinos, las pulseritas con los colores de la bandera patriótica, los anillos con la serpiente enroscada, todo tipo de parches con insignias y simbolismos del movimiento, etc...
Entre estos dos tipos de verdaderos vascos, hay por igual muchos individuos que suplen su desconocimiento casi absoluto del idioma primigenio, con la memorización sistemática de ciertos temas musicales que son de presencia obligada en estos certámenes rupestres, así como con el abuso en la exageración del acento de vascorro meridional...
De los ritos de apareamiento del abertzale medio, mejor hablamos otro día, pues se acerca la sobremesa, tiempo de reposo y apaciguamiento.
En fin, que esta fauna es la que se nos ha apropiado de todo lo que osamos contemplar: desde el cielo hasta la tierra. Desde lo que dicen que fué, hasta lo que están empeñados en que sea. Desde lo individual, hasta lo colectivo. Desde lo divino hasta lo meramente humano. Son la tribu elegida por el anti Diós, para llevarnos a todos hasta el fondo del mar y fundar un mundo perfecto en el nuevo Edén, donde las vacas tendrán los mismos derechos que las personas, los hombres podrán casarse con sus primas las veces que quieran (al igual que las mujeres), las ovejas latxas hablarán en vascuence y recitarán las obras completas de... algún poeta abertzale, y todo será eusko por los siglos de los siglos, agur jauna...
Y después de una buena siesta, se levantan del eusko katre, que empieza el amistoso de la selección de España, que promete goles a raudales...
Mientras las provincias vascongadas sigan siendo España, se tendrán que j... y aguantar. Cuando se separen, les pondremos alrededor un muro como el de Berlín y allá dentro que hagan lo que les dé la gana.
Yo también lo siento por la gente que no es separatista, pero he vivido allí, los conozco bien, y son tibios, ahí nadie da la cara por España. Tienen lo que han sembrado ellos mismos durante toda su vida.
Tiene una gracia especial, carente de la mas mínima traza de humor, la contemplación serena y desapasionada del típico contubernio abertzale, marca euskal label del ganado txiko del país de los platillos roscantes...
Suelen ser reuniones paritarias en cuanto al género de los participantes, no siendo muy clara la diferenciación entre los sexos, pues tanto la indumentaria, como los tocados capilares han sido diseñados para que no existan características morfológicas externas que diferencien a los individuos por su género.
En cuanto a la pureza de la raza, coexisten los vascos con profundas raices étnicas (con apellidos tan caracteristicos como los Arraskamelabarrigabeitia, Lepikaelpitilingorri o Tontikodelhabasolo de toda la vida) descendientes directos de los antiguos juntavacas del Amboto, o de los sorvechipirones del cabo Matxitxako. Junto a estos, indistinguibles fenotípicamente, están los reketevascos de nuevo cuño de apellidos tan euskaldunes como Loudeiro, Alonso, Pérez, Cantalejo o Jimenez.
(...)
Lo siento por los ciudadanos españoles que viven en Vascongadas y tienen que aguantar a estos nazis dictadores, votados por gentuza que dice ser vasca y que en realidad no le llegan a la pata de una cucar.acha, gracias a que más de 11 millones de españoles entre to.ntos, ignor.antes, v.agos y ch.orizos nos traicionaron a todos, aupando al PSOE para pagar a los terroristas dejándoles sentarse a su mesa, siendo uno más.
Votar no es un derecho, es una responsabilidad, ¿no os parece?. Y queda demostrado que no todos somos capaces de cumplir con la misma.
¡ouuuccch! ¡Cómo escuece!