El nadador estadounidense Michael Phelps, que ha quedado por detrás de su compatriota Ryan Lochte en la final de 200 metros estilos de los Mundiales de Natación de Shanghai, ha dicho estar "decepcionado" con la plata. Por su parte, Lochte, que ha batido además el récord mundial de la prueba, lo atribuyó a su "capacidad de aceleración".
Phelps, el único atleta que ha ganado ocho medallas de oro en unos Juegos Olímpicos (Pekín 2008), y que acumula 16 oros olímpicos, ha dicho que durante la prueba se sintió "bien". "Pero se me hizo un poco largo de terminar", ha agregado. "Estoy un poco decepcionado, pero al mismo tiempo, he sido más rápido que en los Juegos de 2008, y eso es bueno", se ha consolado.
"Lo que me ha frustrado más que ninguna otra cosa es que (cuando terminó la carrera) pensé que iba a acabar el primero, pero eso es lo que hay", ha concluído. Entretanto, Lochte ha asegurado: "Sobre la carrera, todo lo que puedo decir se resume en una palabra: capacidad de aceleración, eso es todo, de verdad que eso lo es todo".
"Ya sé que siempre va haber una batalla entre Michael y yo, yo lo hice mejor esta vez, y batí el récord mundial", ha comentado. "Cada vez que bates un récord mundial tienes que estar emocionado, yo lo intenté con todas mis fuerzas, y mi esfuerzo se vio recompensado", ha concluído.