El Gran Premio de India, decimoséptima prueba del Mundial de Fórmula 1, debe disputarse el próximo 30 de octubre, pero lo cierto es que el aspecto que presenta el Circuito Internacional de Buddh –en las afueras de Nueva Delhi–, a poco más de un mes de la disputa de la carrera, deja bastante que desear.
Así puede comprobarse en las imágenes que ha subido un aficionado, llamado Parth Doshi, a internet. Arena, zonas sin asfaltar, multitud de escombros y gradas que aún no han sido construidas son los síntomas que muestran que la prueba india corre serio peligro de no disputarse.
Sin embargo, tanto la Federación Internacional del Automóvil (FIA) como Formula One Management (FOM), la empresa que gestiona el gran circo del motor y que preside Bernie Ecclestone, tienen en cuenta que los operarios indios trabajen a destajo y lleguen a tiempo para finalizar las obras.
Algo parecuido ocurrió el año pasado en el Circuito Internacional Yeongam de Corea del Sur. A pocos días de celebrarse la prueba, el pasado 24 de octubre, ni siquiera había sido finalizado el trazado y, de hecho, muchos detalles quedaron sin ser rematados. Pero al final se terminó la pista a sólo unas horas de que comenzara el Gran Premio y la carrera, ganada por el español Fernando Alonso (Ferrari), pudo disputarse sin ningún tipo de incidencia.