El Unicaja, que jugó 35 minutos muy irregulares y de constantes errores, reaccionó en los últimos cinco y tuvo la oportunidad de forzar la prórroga, pero el base letón Kriptars Valters falló el último ataque y el Zalgiris Kaunas se llevó el triunfo (67-65).
El conjunto malagueño se enfrentaba a un equipo con muchos problemas en la clasificación -una sola victoria- y que tenía su última oportunidad para continuar con opciones de clasificarse para la siguiente fase.
El Unicaja volvió a evidenciar los mismos errores de otros encuentros, falta de concentración aderezados con múltiples errores en ataque y defensa que le llevó a tener una desventaja de 10-0 a los cinco minuto.
El Zalgiris, que ganó en el primer cuarto 19-11 por su acierto y fortaleza, también tuvo sus altibajos, lo que fue aprovechado por el Unicaja al despertar algunos de sus jugadores, sobre todo el base letón Kriptars Valters, que le dio más consistencia al sistema ofensivo (27-22, min.15), aunque el equipo cajista evidenció numerosas lagunas y echó en falta nuevamente al pívot inglés Joel Freeland (seis puntos en veinte minutos).
No mejoró el juego del Unicaja en el tercer periodo. El Zalgiris, bien dirigido por el base estadounidense Ty Lawson, tuvo mejores sensaciones que el conjunto andaluz, quien siempre estuvo por detrás, a pesar de los intentos de crear peligro, pero no era el día defensivo y en ataque se notó la ausencia de varios jugadores, entre ellos Darden y Freeland (50-42, min. 30).
El encuentro parecía sentenciado para los locales según transcurrió el último cuarto, pero el Zalgiris no terminó de rematar al Unicaja, que con un parcial de 0-9, en los mejores minutos del escolta estadounidense Gerald Fitch y de Valters, ambos con dos triples (60-59, min. 37), le dejó una oportunidad.
El equipo español incluso se puso por primera vez por delante (63-65, min. 39), aunque no lo supo aprovechar, porque los lituanos lograron defender masivamente el último ataque del Unicaja y falló Valters lo que pudo ser el forzar la prórroga o incluso la victoria (67-65).
Gran victoria del Gescrap Bizkaia
El Gescrap Bizkaia ha aprovechado la ausencia del NBA Nicolás Batum en el equipo rival para recuperar opciones de estar en el Top16 de la Euroliga con una triunfo por 97-75 frente a un SLUC Nancy al que recuperó incluso la diferencia de puntos entre ambos equipos, algo que puede ser vital ante la tremenda igualdad del Grupo A.
Aunque el Nancy ha aguantado la exigencia del choque con una rotación que ya era corta con Batum, al final ha claudicado en un último cuarto muy bien gestionado por los locales, que le devolvieron la moneda de los últimos minutos del encuentro jugado en el Jean Weille.
En esos minutos postreros, curiosamente han sido los bajitos las estrellas de un equipo que ha tenido que luchar durante buena fase del partido contra el acierto exterior visitante. Así, primero Raúl López, luego Josh Fisher y finalmente Jackson han sido claves en el triunfo más que holgado de su equipo. No obstante, ha sido Alex Mumbrú, brillante al principio sacando partido de su mayor envergadura que su par, el máximo anotador y el más valorado del Bizkaia (15 y 20).
Entre los de Jean-Luc Monscheau, que se ha apoyado fundamentalmente en cinco jugadores, los mejores han sido Jamal Shuler (19 puntos) y Adrien Moerman (16)
De inicio el Nancy acusó mucho la ausencia de Batum, ya que Jean-Luc Monschau puso en cancha a tres 'pequeños' que no alcanzaban el 1,85 de altura de media -Linehan, Anagou y Shuler- y Mumbrú desequilibraba llevando a su par al poste bajo. Los 7 puntos del catalán en 3 minutos decidieron al técnico galo a variar la estrategia y colocar a Sanmick para frenarle.
A pesar de un intento de escapada local (17-9), Monschau logró su objetivo. Primero igualando el partido (19-19) y luego poniéndose por delante (19-22) antes del final del primer cuarto (22-22). Como no tenía a Batum, el Nancy se la jugaba a los triples y a los contraataques, con los que mantuvo el equilibrio hasta el descanso (40-39), a pesar de otro tímido intento local de marcharse (36-30).
Siguió aguantando en el tercer cuarto el Nancy, pero ya se le empezaba a ver muy obligado a la hora de lanzar y desgastado tanto físicamente como por las siete personales de sus dos hombres alto de entidad, Akin Akingbala y Moerman.
Y acabó pagando ese desgaste el conjunto francés, a pesar de un 0-6 que le puso llevó al 72-68 que fue el inicio de su fin, que se concretó con el 22-7 final después de una "tangana" que supuso la descalificación de D'or Fischer y Moussa Badiane.