La primera jornada de la Carrera a Dubai nos ha dejado luces y sombras por parte de los primeros espadas del golf mundial. Hace unos días nos planteábamos las diferentes situaciones que podían producirse en esta última gran cita del calendario europeo, y debemos reconocer que este primer round –utilizando un término pugilístico– no nos ha dejado indiferentes, sino más bien al contrario.
Ha servido este primer día para corroborar el gran momento de forma del norirlandés Rory McIlroy, con unos primeros nueve hoyos monótonos, pero con un despegue inusitado en la segunda vuelta al firmar una tarjeta espectacular de 30 golpes, lo que le ha servido para colocarse en tercera posición a dos golpes del líder, el sueco Peter Hanson, que ha sumado un total de 67 para cinco bajo par del campo Jumeirah Golf Estates. Además, McIlroy asesta un primer directo a la mandíbula al actual número uno del ránking mundial, el inglés Luke Donald, que ha firmado una discreta tarjeta de 72, igualando el par del campo.
La sorpresa, relativa, la protagoniza el liderato de Hanson, con una vuelta perfecta de 8 bajo par, sin mancha en su tarjeta, asentada en los primeros nueve hoyos y refrendada con seis birdies en los segundos. El segundo lugar, tras esta primera jornada, lo ocupa el escocés Paul Lawrie, a un solo golpe.
Si brillante ha sido la actuación de McIlroy –novio de la número del tenis mundial, la danesa Caroline Wozniacki–, Sergio García tampoco le ha ido a la zaga. El castellonense, al que parece que los pequeños parones en la competición le sientan de maravilla, ha firmado una tarjeta de cinco bajo par para situarse cuarto tras una primera vuelta que incluso podría haber sido espectacular para él de no ser por el bogey del hoyo 9 y el desafortunadísimo doble bogey del 17. El Niño ha demostrado una vez más en esta temporada que su juego está muy asentado y su cabeza, hoy por hoy, le funciona a las mil maravillas.
Y si la vuelta de Sergio ha sido excelente, qué decir de la del gaditano Álvaro Quiros, con una tarjeta de 4 bajo par, que le ha situado en quinta posición. Al igual que el de Borriol, su primer día podría haber sido mejor de no ser por los tres bogeys –en los hoyos 9, 16 y 18– que han empañado su tarjeta para dejarle con un sabor agridulce. El madrileño Gonzalo Fernández-Castaño ha firmado una buena actuación con dos bajo par. Al igual que Miguel Ángel Jiménez –los viejos rockeros nunca mueren– y Pablo Larrazábal, del que todos esperamos más, por juego y calidad. Ambos han firmado uno bajo par para empatar en la vigésimo primera posición.
Rafael Cabrera-Bello se ha quedado al par, compartiendo posición con el número uno mundial, con una vuelta muy aceptable. En especial para las posibilidades del canario, que bastante ha conseguido con estar presente entre los 60 mejores jugadores de Europa.
La cara negativa la protagonizan el inglés Lee Westwood y el alemán Martin Kaymer, actuales números tres y cuatro del mundo, respectivamente, porque ambos no han podido bajar del par del campo con +1.
El Jumeirah Golf Estates ha demostrado que puede ser un escenario fácil para un gran resultado y a la vez difícil y en donde te puedes liar, en cualquiera de los hoyos de su recorrido, llevándote a concluir con un resultado nada positivo.