Treinta y nueve goles a favor y ninguno en contra como local; tres victorias sobre siete posibles como visitante. Son las dos realidades esta temporada del Barcelona, cuyo dominio es tan incontestable en el Camp Nou como frágil su consistencia como visitante.
Después de diecisiete jornadas, el Barça tiene esta temporada ocho puntos menos que el año pasado. En el anterior ejercicio los de Pep Guardiola sumaban 46 puntos en diecisiete partidos; esta campaña han conseguido 38 y se han mostrado especialmente erráticos como visitantes. Lejos del Camp Nou, las cifras de los azulgranas son desconocidas. En ocho partidos, el Barcelona ha empatado más encuentros (4) de los que ha ganado (3) y, además, en Getafe sumó su primera derrota de la temporada (1-0).
Al margen del gran triunfo en el clásico ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (1-3), las otras dos victorias conseguidas han sido por la mínima (0-1 en Granada y Gijón). Pero el gran inconveniente para el Barça han sido los tres empates cedidos en San Mamés, Anoeta y Valencia, todos ellos a dos, y el concedido ante el Espanyol, este domingo, en Cornellà-El Prat (1-1), al margen de la derrota, la única de la temporada, en Getafe (1-0).
Messi, desapercibido como visitante
Sus números como visitante desdibujan una gran trayectoria en casa y el paradigma es la actuación de Leo Messi. El argentino, segundo máximo anotador del campeonato con diecisiete tantos, únicamente ha marcado uno lejos de casa en Liga. Un gol que le sirvió a su equipo para recuperar un punto a última hora en San Mamés, donde el Barça igualó ante el equipo de Marcelo Bielsa.
Messi ha marcado dieciséis de los 39 tantos logrados por su equipo en el Camp Nou, donde los azulgranas han ganado ocho partidos y han empatado uno (0-0 ante el Sevilla). Total, un promedio de 4,3 goles a favor. Fuera el universo es otro. Los culés han marcado doce tantos (1,5 por partido) y han encajado nueve (algo más de uno de promedio).
A dos partidos para el final de la primera vuelta, el Barcelona de Pep Guardiola se enfrenta a un escenario desconocido. Por una vez está por detrás en la clasificación y ya no depende de sí mismo. El 1-3 conseguido en el Bernabéu permitió al Barça quedarse a tres puntos del Real Madrid. Ahora, con los dos puntos cedidos en Cornellà-El Prat, la distancia se eleva a cinco. Un nuevo reto para el mejor Barça de la historia.