La selección española de balonmano tratará de certificar esta tarde (16:10 horas / Teledeporte) su clasificación matemática para las semifinales del Campeonato de Europa con un triunfo ante Islandia, que, tras su victoria sobre Hungría, aún mantiene vivas las opciones de acceder a la lucha por la medallas.
Para ello, el conjunto español volverá a confiar en la solvente defensa que le ha permitido concluir invicto los cuatro partidos que ha disputado en Serbia, donde los de Valero Rivera se han impuesto a rivales de la talla de Croacia o Francia, vigente campeona olímpica, mundial y continental. Unos resultados que permitirían al combinado español, aún en el caso de perder ante los islandeses, seguir dependiendo de sí mismo para acceder a las semifinales, de las que ahora mismo tan solo le separan dos puntos.
Pero el conjunto español no quiere más demoras, por lo que los jugadores no se plantean más cuentas que derrotar mañana a un conjunto islandés que ya apeó a España de la final olímpica en los pasados Juegos de Pekín.
Una semifinal olímpica en la que tuvieron un papel decisivo en la derrota española el central Snorri Gudjonsson y el lateral derecho Olafur Stefansson, que no pudieron viajar a Serbia por lesión. Dos importantes bajas que no merman, sin embargo, la peligrosidad del equipo islandés, que mantiene las mismas señas de identidad que le permitieron hace dos años colgarse el bronce en el Europeo de Austria: una sólida defensa y velocísimo ataque.
Dos factores que pondrá, una vez más, a prueba la diligencia del ataque español, que durante algunas fases del encuentro con Croacia mostró la fluidez que reclama el seleccionador, haciendo circular con velocidad el balón para nutrir a los extremos. Una fluidez que volverá a ser mañana determinante ante una Islandia que no acostumbra a desaprovechar cualquier fallo rival para montar fulgurantes contragolpes con los extremos Thorir Olafsson y Gudjon Valur Sigurdsson como puntas de lanza.
Pero los peligros de Islandia no se limitan a su vertiginoso contragolpe, ya que los nórdicos cuentan también con un solvente ataque estático, en el que la efectividad de los laterales Asgeir Hallgrimsson y Arnor Atlason ha servido para paliar la perdida de imaginación que suponen las ausencias de Stefansson y Gudjonsson.
Una primera línea en la que con casi toda seguridad también estará ante España el jugador del Fuchse Berlín Alexander Petersson, elegido mejor lateral derecho del pasado Mundial de Suecia, pese a las molestias en un hombro que le impidieron jugar ante Hungría. En ese partido volvió a tener un papel determinante en el conjunto islandés la pareja que forman el central Aron Palmarsson y el pivote Robert Gunnarsson, que tiene en el jugador del Kiel uno de sus mejores socios, como testifican la manera constante en la que se buscan ambos jugadores.
Una sociedad que obligará a España a mantener la misma intensidad defensiva, tanto si opta por el 6-0 que tan buenos resultados le está dando en el campeonato, como por el 5-1 que el pasado año sirvió para apabullar (32-24) a los islandeses en el Mundial de Suecia en un choque en el que, como ocurrirá esta tarde, la selección española se jugaba también el pase a las semifinales.